Vertidos de residuos radiactivos. Regalo para toda la vida. |
- “¿Está usted de acuerdo con las prospecciones de petróleo autorizadas a la multinacional Repsol frente a las costas de nuestras islas?”
Rotundamente NO.
- “¿Está usted de acuerdo con la realización de prospecciones de petróleo con las garantías más estrictas y los medios de actuación más adecuados?”
No sé, puede que sí.
- “¿Está usted de acuerdo con convertir las Islas Canarias en un territorio que sea ejemplo y escaparate del aprovechamiento de los recursos energéticos que ofrece la naturaleza?”
Rotundamente SI
Paulino Rivero y su Gobierno lanzan una consulta manipulada y manipuladora. El PP se desmelena y lanza la excomunión contra el voto popular. Pero nadie analiza la pregunta, su tergiversación, dirigida a una respuesta que viene cocinada en la dirección que interesa al Gobierno. Un gobierno de nacionalistas y socialistas (y también en épocas por los populares) que es incapaz de dar respuesta a otros retos energéticos y medioambientales, pero claro, lo fácil es fomentar el populismo contra unas prospecciones de una multinacional que ha dado amplias muestras de desprecio y ninguneo a los canarios por mucho vino y queso que regalen.
Que las prospecciones pueden afectar al turismo. Más le afectará el agotamiento de la energía 'barata' para llenar los hoteles y apartamentos que ocupan los territorios de mayor calidad ambiental y paisajística que tenía Canarias en su costa. Pero ahora resulta que los países petroleros del Golfo Pérsico son destinos turísticos competitivos a pesar de su calor insoportable y una cultura totalmente misógina y represora. Incluso se permiten el lujo de cambiar el calendario del mundial de fútbol para que tenga lugar en navidades...
Que las prospecciones petroleras en el brazo de mar entre las Islas Canarias y el continente africano tienen un impacto ambiental no lo duda nadie. Como lo tiene el creciente tráfico de buques cargados de oro negro, o de productos químicos o residuos nucleares (incluso sus vertidos a la fosa atlántica, con o sin conocimiento de las autoridades).
Pero, claro, en esto de ser más papistas que el Papa, todos nos apuntamos a la negación cuando nos asusta o preocupa algo, aunque no seamos solidarios con Nigeria que sufre una verdadera hecatombe ambiental por los vertidos, o los conflictos bélicos que provoca el petróleo y el mantenimiento de dictadores y monarquías corruptas o antidemocráticas… Todo sea por el petróleo que cada día consumimos en nuestros vehículos o en el encendido de nuestro ordenador o nevera.
Y esto no es un canto bucólico y pastoril a un corte radical con nuestro modelo de vida, pero sí una llamada de atención a la necesidad de ir educando y fomentando el cambio ante los problemas que genera este modelo energético y su agotamiento.
Yo abogaría por hacer frente común por el desarrollo de energías limpias y por lograr el mejor de los acuerdos posibles (seguridad, retorno para Canarias de los beneficios…) en caso de explotar petróleo o gas en nuestras costas. Sí, nuestras, porque a dos mil kilómetros de la Península no se puede decir que éste sea un problema de linderos entre España y Marruecos, porque eso es reconocer que seguimos siendo considerados una colonia y no una Comunidad alejada y con criterios propios sobre nuestras necesidades y modelo de desarrollo (por cierto ¿tenemos esos criterios…?)