jueves, 24 de febrero de 2011

Maspalomas, la víctima natural de la especulación

El Oasis antes hace cincuenta años

Un periódico local ha publicado una encuesta ante el deterioro de la zona turística de Maspalomas debido a la pérdida de arena de la playa y su transformación en un enorme pedregal de cayados (en Canarias, piedras lisas redondeadas por la erosión) que convierten el paseo o el baño en una experiencia desagradable y arriesgada.
Como todas las encuestas, la simplificación en las respuestas es significativa, aunque lo importante no es el resultado cuantitativo de la misma, sino la realidad que oculta la información que hemos recibido durante años sobre las causas y orígenes de este desastre ecológico.
La encuesta busca un culplable: ¿serán “los políticos”?, ¿“las construcciones de hoteles y apartamentos que interrumpen el ciclo de la arena”? ¿O es “la naturaleza. Un fenómeno en el que sólo intervienen el viento y las olas”?. Pues sí, todos son culpables, pero hay más.
Ya comenté en un artículo anterior que este año se celebra el cincuenta aniversario del concurso internacional de ideas que inició la transformación de toda esta zona para convertirla en el mayor centro turístico de Canarias y el más importante para el invierno en Europa. La propuesta vencedora apenas comenzó a desarrollarse y fue superada por la ambición y el negocio veloz que se originó, lo que dio lugar a que ahora nos encontremos una realidad fruto de la improvisación y la especulación.
Se construyó donde no se debía: sobre dominio público (de costa o de cauce público), sobre espacio protegido y se primó el pelotazo urbanístico y la desnaturalización de un paraje inigualable.
Si mal no recuerdo, se permitió la penetración de las construcciones hasta el escándalo, con la construcción del Riu Palace Maspalomas en el vértice sur de la urbanización de Playa del Inglés, lo que originó una barrera artificial para el tránsito de arena. Una parcela en primera línea del Paraje Natural era demasiado negocio para pensar en otras opciones o posibles impactos en el entorno natural.
Pero no quedó todo ahí. El Ayuntamiento de San Bartolomé y sus regidores –cuya situación personal económica y patrimonial mejoró sustancialmente coincidiendo con la actividad política-, decidieron canalizar el barranco desde la Avenida Alejandro del Castillo hasta la charca de Maspalomas (antes llamado Oasis) donde ya el palmeral del lugar había desaparecido o había sido integrado en los jardines de algunos complejos hoteleros. La ocupación urbanística de los márgenes del canal fue inmediata. El cauce público y natural se convirtió en un suculento negocio urbanístico. Un negocio redondo.
Visto desde el cielo, el canal es como una especie de  disparadero que conduce una potencia de agua impresionante que antes se distribuía por el entorno y aportaba la humedad necesaria para el desarrollo del oasis y su palmeral. Hoy día esta infraestructura consigue cada vez que llueve en el sur (que cuando lo hace suele caer mucha agua) romper la barrera que separa el mar con la charca y arrastrar toda la arena que encuentra a su paso, lo que ha dado lugar a que uno de los parajes turísticos más importantes de Canarias esté en un proceso de grave degradación y que su supervivencia pase por la creación de infraestructuras artificiales.
Y retomo la encuesta periodística para plantear si la pregunta fundamental habría de ser: ¿Cree que los que se han beneficiado con la destrucción del oasis de Maspalomas deberían compensar a la sociedad y restituir el lugar para evitar su plena desnaturalización?
Creo que deberíamos plantearnos esta formulación, ya que lo único que se contempla por parte de los responsables políticos y técnicos es parchear el problema en una espiral que nos conduce a un final trágico para uno de los más hermosos lugares que la naturaleza creó en Canarias.

15 comentarios:

  1. Mejor callao o callaos que cayados. ¿verdad? Por otro lado, si Santa Lucía de Tirajana elimina el topónimo Tirajana por cuestiones políticas que son incomprensibles para la isla, podremos ahora llamar a la Playa de Maspalomas Playa de los Callos de Maspalomas. Dicen que las dunas son espacio natural, a pesar de las alteraciones humanas perceptibles, así que algunos ecomaniáticos deberían de aprender a estar callaos, ante las futuras intervenciones humanas en la zona de Maspalomas. Una opinión.

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  2. No tengo palabras para expresar lo que siento ante esto.

    Seguimos siendo tan Ignorantes...Tan
    Ignorantes..

    "Algún día os dareis cuenta de que el dinero nos epuede comer" palabras del Pueblo Cree, al "hombre" blanco.

    "Todo lo que el hombre le hace a la Tierra,se lo hace a sí mismo"..-Gran Jefe Josef. Carta al gran Jefe de Washington


    Gracias Michel por tu Amor a nuestra tierra.

    Abrazos Sigrid.

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  3. Hola Jaime. Se puede decir cayaos o cayados, lo de callados es incorrecto porque es del verbo callar. En cuanto a tu opinión sobre si algunos ecologistas (lo de maniáticos considero un despectivo que no acepto) deberían callarse, estás en tu derecho, el mismo que tienen ellos para proponer sus cuestiones. Los ecologistas han advertido antes (Ascan tiene más de 40 años de historia y muchos 'descendientes', lo que es de celebrar) los riesgos y necesidades de una política que contemple la fragilidad de nuestros ecosistemas. Ahora, si abogas por una intervención humana sin supervisión y sólo con el fin de crear una playa artificial, este no es el blog que buscabas. Otra opinión.

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  4. Hola Sigrid. Así es, nuestras vidas van dejando un álbum de cosas que hemos hecho o vivido, pero también de lugares y situaciones que se alteran por nuestra pasividad o ambición desproporcionada. Consumimos los recursos de nuestro planeta para muchas generaciones y somos conscientes del daño... "¡pero que nos quiten lo bailao!". Hay muchos cómplices en esta tragedia agónica del planeta que se acelera por instantes, pero también hay muchos que buscamos una alternativa. Gracias por tus palabras.

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  5. Siempre me he cuestionado hasta donde llega la responsabilidad política en cuanto a la intervención en el suelo, sobre todo en zonas tan frágiles como nuestras islas. El espacio es un bien que heredamos conjuntamente con todas las especies que lo habitan y, si bien es necesario intervenir en él, el hacerlo para especular sobrepasa toda noción de "necesidad". Es cierto que la necesidad o no de construir hoteles, apartamentos, viviendas, etc. en determinadas zonas es cuando menos opinable. Lo que no creo que sea opinable es que el único criterio que se tenga para decidir donde se interviene, sea la rentabilidad económica. Éste -la especulación- debería ser un delito no prescriptible.

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  6. Hola Antonio. No sólo se ha especulado (recalificaciones sospechosas de parcelas en procedimientos inquietantes), sino que se ha ocupado dominio público marítimo (de todos) y cauces públicos (alterando e ecosistema que dio lugar al oasis). Gracias por tu comentario que comparto...

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  7. Michel, creo que no me has entendido. Lo de callaos deriva de nuestra toponimia, que también es patrimonio cultural (El Callao, Cañada de los Callos, etc.)La otra cuestión que planteo es que las actuaciones humanas han sido tan graves en Maspalomas que una más ya no significa nada, aunque el valor natural que se la dado sea a través de la figura reserva especial. Lo de estar callos es humor negro, igual que el término ecomaniático. No me esperaba tu respuesta. Saludos.

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  8. Hola Jaime. Ahora si lo entiendo, aunque no comparto que callao sea un uso correcto de la toponimia, ya que demuestra que el que transcribió la misma no diferenció entre piedra y el verbo callar. Hay otros graves errores, como el cebadal, cuando viene de sebadal... Respecto al uso de ecomaníacos, yo no esperaba ese calificativo, pero si se trata de sarcasmo o ironía, te ruego excuses mi respuesta.

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  9. ME ALEGRA SABER QUE TODAVIA EXISTEN PERSONAS QUE MIREN POR NUESTRA TIERRA COMO LO HACES TU!! MUCHAS GRACIAS POR COMPARTIR LA INFORMACION CON TODOS NOSOTROS!!

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  10. Gracias a usted, anónimo... La constatación de que hay personas sensibles es un estímulo para continuar el esfuerzo.

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  11. ¿cuando se le llamó Oasis? he encontrado textos con la denominación charca de mediados de los 50.

    saludos

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  12. Hola Jaime
    Así es, su nombre es Charca de Maspalomas, incluso en el libro de David Bannerman (1922) hay más de cuarenta citas a la Charca, pero también en algunas ocasiones lo asemeja a un oasis. Incluso Sabin Berthelot lo denomina albufera (1829). No obstante, en el diccionario de la RAE se considera palmeral como sinónimo de oasis. Sin que sea científico sino como licencia literaria, utilizo el término oasis para señalar la conjunción entre zona dunar desértica, charca y palmeral, ya que la palabra charca no describe el conjunto.

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  13. ok, por cierto, he encontrado una defensa del Cabildo Insular de GC al turismo de masas nórdico en relación a la Charca de Maspalomas y la Playa de Maspalomas, a mediados de los 50. Con vigilante y todo.

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  14. Hola jaime
    ¿Te refieres a un libro, artículo, documento? ¿Podrías poner el enlace...?

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  15. Documento, en papel. Recopilando material para investigación.

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