jueves, 26 de febrero de 2015

La tele canaria y el Parlamento de los líos

Candidatos propuestos al Consejo Rector de RTVC.
Tal vez a muchos no nos sorprenda la carajera montada en torno a la constitución del primer Consejo Rector de la Radio Televisión Pública de Canarias. Otro episodio más del eterno desacuerdo en la Cámara Autonómica (la más paritaria y, a la vez, con menor representación democrática para el gusto de muchos que vivimos en estas ínsulas). Triste espectáculo, insisto, que se suma a la extensa lista de desencuentros de nuestros parlamentarios y que refleja cómo dirigen los órganos y empresas que dependen de la Comunidad Autónoma.

El caso más grave (creo, pero para algunos puede que sean otros) ha sido el del desaparecido o auto hundido Consejo de Administración del propio ente público de RTVC, donde el director de la tele ninguneaba a los representantes (cosa que ha sido su modus operandi, como lo es tratar con chulería a los diputados regionales) y éstos tuvieron que dimitir (los que no habían fallecido) porque no aguantaban más el papel de monigotes desde que fueron nombrados desde hace 'sólo' unos 15 años, sin que el Parlamento de Canarias se acordara de renovar sus miembros y poner orden en la 'casa' con la excusa de aprobar una Ley y regular lo que habían dejado podrir.

En estos días, se intentaba crear el Consejo Rector del ente, tras la aprobación de la Ley 13/2014, de 26 de diciembre, de Radio y Televisión Públicas de la Comunidad Autónoma de Canarias. Un Consejo que pondría fin al mandato de Willy Carcía García, la apuesta de Paulino Rivero para dotar a la Tele Canaria del máximo responsable que se salda con una valoración extraordinaria de unos pocos y el rechazo más absoluto de otros pocos. Un mandato que transmite como herencia un modelo de gestión económica y de programación de contenidos que dejará huella... Y dejo de hablar de este señor porque mi deseo (y no lo he ocultado durante años) es que regrese a su casa y deje esta empresa financiada con fondos públicos para que la gestionen profesionales y se pueda implicar en su futuro la sociedad canaria y el Parlamento (espero que con más interés que el mostrado hasta ahora en estos últimos ocho años...). Pero lo que debía ser un trámite administrativo ha sido un nuevo (y enorme) fracaso. De hecho, probablemente no se cree el Consejo Rector hasta después de las elecciones autonómicas...

La polémica en la gestación del Consejo Rector del ente, surge por el perfil de las personas designadas por los distintos grupos políticos. La Ley establece que los miembros del Consejo deben ser “personas con la condición política de canarios, de reconocida cualificación y experiencia profesional, entendiendo por tal indistintamente:

  • Las personas con formación superior o de reconocida competencia que durante un plazo no inferior a cinco años hayan desempeñado funciones de administración, alta dirección, control o asesoramiento en entidades privadas.
  • Las personas de reconocida competencia que hayan desempeñado funciones de similar responsabilidad a las enunciadas en el anterior apartado en un plazo no inferior a cinco años en entidades o instituciones públicas.
  • Las personas con formación superior o de reconocida competencia con relevantes méritos en el ámbito de la comunicación, o con experiencia profesional, docente o investigadora".

Dicho esto, entendemos que se puede tratar de personas con formación superior como diplomados, master, licenciados o doctores, que tengan experiencia en la dirección de entidades privadas o públicas por más de cinco años. O lo mismo pero entre profesionales de la comunicación, o la docencia...

A primera vista, no queda muy claro que un militante político pueda ser excluido. Ni que tengan que tener los candidatos un título determinado, pero para eso están los debates y las ganas de decir algo por una vez (después de todos estos años permitiendo este despropósito) por parte de los diputados regionales. No obstante, han intentado vetar a un candidato propuesto por el PP y que al parecer no tiene titulación universitaria (desconocemos cuál es su nivel de estudios), por lo que entraría en el Consejo si no hubieran rechazado su nombramiento un individuo con un perfil profesional discutible que podría alcanzar la presidencia del Consejo como el resto de miembros del mismo. Una situación que recuerda (demasiado) al deplorable estado actual del ente, presidido por un profesional que tiene reconocido por Paulino Rivero su título de estudios de la Universidad de la Vida.

Paco Moreno, uno de los candidatos a formar parte del Consejo y que atesora una enorme experiencia en cargos de responsabilidad en empresas audiovisuales públicas y privadas, se ha retirado, lo que imposibilita en la práctica la creación del Consejo Rector y, por ende, el fin del mandato de Willy García García. Una situación que nos temíamos al ver cómo se disponía de los puestos sin consenso político y sin un modelo claro de radio televisión pública (mientras menos claro, mejor, pensaría alguno). Y, así, la pelota quedó en el tejado de los candidatos, sin que éstos se merecieran ni esperaran formar parte del circo que se ha montado. Pero algo tenían que olerse, ya que han sido muchos años de discrepancias y lucha para sacar de la oscuridad la administración y dirección del ente. Además, los cargos a los que fueron propuestos incluían competencias tan relevantes como la aprobación de contratos de servicios, despidos de personal y, sobre todo, poner en marcha las directivas del Parlamento y del Consejo Asesor.

No les quito más tiempo, pero acabo con la triste convicción de que este Parlamento no entiende los mensajes de la ciudadanía. No comprende que un órgano público de información debe ser totalmente transparente y tener más definición que la pantalla por la que nos llega su señal. Y cada día que pasa con Willy García García al frente del ente es un despropósito más que demuestra lo poco que se estiman los representantes del pueblo ante un señor que trata con un desprecio inaudito a la Cámara y, a través de ella, a todos los ciudadanos.

“Gobernar es difícil. Decirle a todos lo que quieren escuchar es facilísimo, pero no es ser responsable" (Paulino Rivero. 26/02/2015)

domingo, 1 de febrero de 2015

Más turistas o más turismo (casi balance de una legislatura)

Pabellón de Canarias en Fitur (Nacho González)
Finalizan cuatro años de legislatura. Un periodo en el que hemos visto la obsesión por decir que llegaban más turistas, olvidando que se debía conseguir asentar y profundizar el negocio turístico. De ahí que el balance oficial que se hace en el sector turístico es el de lo han hecho maravillosamente. O dicho de otra manera: éxito de ocupación con cifras indiscutibles y categóricas que son confirmadas por cualquier empresario del sector. Unas cantidades de récord que comenzaron a crecer y crecer (tras el profundo agujero que crecía y crecía sin que nadie se atribuyera el fracaso por su 'maravillosa' gestión), desde que en 2009 se hizo peligroso viajar a los países árabes. Pero también, la caída del turismo, tenía su origen en los problemas económicos de los países emisores. Los elementos que se habían conjurado para la crisis perfecta del turismo en Canarias se echaron a un lado por la reducción de destinos seguros y atractivos para los europeos. Y, así, durante este tiempo, hemos vivido de prestado y con vértigo por la situación económica, la nube de cenizas volcánicas de Islandia, la pérdida del mercado nacional por la crisis galopante y el encarecimiento de los vuelos (en este país resulta más barato a un peninsular ir al Caribe que a Canarias gracias a nuestra brillante clase política), o los atentados que alimentan la psicosis del terrorismo islámico, de los conflictos sociales, religiosos y políticos que se han convertido en el pánico nuestro de cada día.

La incertidumbre y pérdida de confianza es general. Todo lo que era 'normal' ha perdido la lógica y ahora no hay seguridad en el sistema financiero. Los precios del oro o del petróleo varían sin fundamento. Pero todo ha sido orquestado por unos 'lobos' que han corrompido gobiernos (o han sido nombrados por los propios gobernantes) vendiendo sin control productos subprime o preferentes que pudren el desarrollo de nuestras sociedades a pesar del esfuerzo que realizamos para sostener costosísimos aparatos administrativos que persiguen implacablemente hasta el mínimo céntimo del ciudadano de a pie pero no vigilan a las organizaciones más peligrosas y poderosas. De ahí que, en ese ambiente de pánico económico y social, el turismo se ha convertido en la última trinchera de nuestra economía, El turismo ha permitido captar rentas y actividad económica pero no todo ha sido 'maravilloso' al no impulsar el empleo aunque también es cierto que no ha sufrido la pérdida de puestos de trabajo tan devastadora como el sector de la construcción. De ahí que el Gobierno intentara impulsar el sector de la construcción con su plan de modernización de la planta alojativa, lo que a su vez constata el fracaso de las políticas de renovación impulsadas desde hace 15 años con la Ley de moratoria. Una norma que ha tenido la luz de frenar despropósitos y la oscuridad de provocar la pérdida por muerte natural de parte de la oferta alojativa. Un parque de alojamientos que sigue sufriendo un envejecimiento galopante próximo al alzehimer por la gran dependencia e influencia en la imagen de destino a olvidar que se aprecia en muchos puntos del territorio insular.

Durante estos cuatro años también hemos disfrutado de varios factores positivos para el turismo en Gran Canaria, gracias al acierto de calidad alcanzado en el entorno de Meloneras y la mejora de las principales vías de Playa del Inglés que lucen una imagen totalmente renovada y más atractiva para el turista de a pie, gracias a un Consorcio que estuvo a punto de ser cancelado hace cuatro años por la desidia durante la anterior legislatura. Obras que han coincidido con un periodo de acontecimientos de impacto internacional como han sido la celebración del medio siglo de Maspalomas Costa Canaria, con el reconocimiento de la Organización Mundial del Turismo al celebrar en este destino el Día Mundial del Turismo, y el esfuerzo por consolidar en Maspalomas un espacio para debatir y profundizar acerca del turismo y su futuro con los agentes implicados y el ámbito universitario, académico y de investigación en el Foro Internacional.

Acciones que contribuyen a dar realce a un destino cuyo éxito se asienta en el sol y playa (que son gratis y nadie paga por su uso), en lo saludable de nuestro clima (también regalado en el paquete), en el ambiente de tolerancia y respeto intercultural o de diversidad, como es el caso exitoso del turismo LGTB (con la exitosa iniciativa de participar en el corner del sector en Fitur), y de otros productos -aunque con menos incidencia-que son fruto del esfuerzo de las empresas. Aunque todo apunta a que seguiremos con estos productos para una clientela cada año más envejecida que demuestra que lejos de captar más turismo familiar Gran Canaria se consolida en el espacio de los adultos. Y es que no se cree ni se piensa en otros tipos de turistas salvo excepciones como las iniciativas del empresario alemán afincado en Tenerife, Kiessling, que supondrán un profundo cambio (con retraso y con una apuesta por lo seguro y ya probado en otros lugares) con el acuario y el Siam Park de Maspalomas, una instalación que los propios dueños de Loro Parque reconocen que va a tener un duro competidor en el parque temático que tiene Gran Canaria y que además es gratuito: Maspalomas con su sol y playa...

Sin embargo, poco se ha movido el sector empresarial de esta isla para remar juntos y superar las limitaciones y debilidades del destino, evitar la división en la negociación con los operadores, y buscar la necesaria potenciación más allá del sol y playa en un destino que tiene muchas posibilidades de desarrollo de actividades de negocio para un destino que puede enorgullecerse de poder tener actividad todo el año. Un empresariado que se conforma con un papel secundario en la promoción turística, al dejar en manos de las instituciones todo el protagonismo y diseño de las campañas.

El turismo depende de ti. Curiosa campaña...

Unas campañas que no pasarán a la historia del éxito de nuestro destino (aunque han tenido mucha más sensatez que las de legislaturas anteriores). Un dinero público que se ha gastado para vender nuestro destino con las siguientes claves:

  • El mejor clima del mundo: sabemos el por qué pero no el para qué, que sería el verdadero motivo de esa campaña si se hubiera planteado con criterio.
  • Latitud de vida (ahora vinculada a vielveabrillar): interesante metáfora que no lleva a ningún sitio y menos podrá tener una traslación de interés para otros países al traducir este concepto.
  • El viaje ilustrado (onthedrav): iniciativa con ilustradores con un resultado desigual, pero que ha supuesto a los ilustradores canarios una decepción (sobre todo cuando Cultura ha desmantelado toda su actividad)
  • Saca tus vacaciones del armario: frase compleja que no permite identificar a Canarias o Maspalomas como principal destino mundial para el turismo gay.
  • Brillo terapeutas: una campaña nuevamente confusa y dirigida a los profesionales del turismo, pero la verdadera necesidad en estos momentos es conseguir concienciar y hacer pedagogía con la población.
  • holaislascanarias: que no es la web de la revista Hola, sino un portal que ha costado 900.000 euros y que no es la web 3.0 que anunciara alegremente la anterior consejera de Turismo, pero que en un par de años ya quedará obsoleta.
  • Para rematar, la campaña del Cabildo grancanario con el lema 'El turismo depende de tí' (ver video en Youtube) nos muestra al nativo salvaje que asalta con cara desencajada al turista en un arrebato de creatividad psicodélica.
Stand de Gran Canaria (infografía)

Dos maneras de ver la promoción turística, la del Gobierno y la del Cabildo que se ha materializado durante estos cuatro años en los desencuentros institucionales y en la representación del divorcio de las promociones en ferias como Fitur. Aunque el verdadero problema que ha traído de cabeza al turismo en la isla ha sido la ley que impide construir hoteles que no sean de cinco estrellas en suelo programado. Una decisión que impone a Gran Canaria el mayor perjuicio y cuya revisión anunciada para finales de 2014 se postergó en un claro desacato y discriminación contra los grancanarios. Un desprecio similar al que el Gobierno de España ha mostrado contra los canarios con la supresión del descuento de tasas aeroportuarias (hasta que la crisis del aeropuerto de Barajas supuso el cambio en los argumentos y de criterio del Ministerio de Fomento. El mismo que privatiza el ente público de Aeropuertos Nacionales en una decisión que deja a Canarias al margen de la gestión de los aeropuertos del Archipiélago.

Así que sólo nos queda esperar que tras las elecciones haya una evolución, un nuevo paso en la mejora de la gestión del turismo en la que se profundice en la necesidad de potenciar el turismo y no el número de turistas; que se asesoren con expertos que puedan dar una visión profesional a quienes desde la política o desde la casualidad han accedido a los cargos de gestión turística; y, sobre todo, a que se haga realidad ese mensaje de apostar por empresas canarias en las acciones de nuestras instituciones, ya que en el caso del turismo no se explica que sean empresas foráneas las que metan la pata por desconocimiento. Ya nos bastamos nosotros para equivocarnos y por menos dinero.