lunes, 31 de enero de 2011

2058

No se asusten, no se trata de una predicción o una propuesta para dentro de cuarenta años... Es el número de visitas que ha tenido este blog desde que el pasado día 4 de enero comencé esta aventura bloguera.
Está claro que el turismo en Canarias tiene mucho sobre lo que debatir y analizar. Así lo demuestran sus visitas y los comentarios recibidos.
Gracias.

sábado, 29 de enero de 2011

Sol sin circo


Uno de los fenómenos comerciales de mayor impacto internacional en el sector del espectáculo y del ocio es, sin lugar a dudas, el Circo del Sol. Una iniciativa de los ex artistas callejeros Guy Laliberté y Daniel Gauthier que se animaron a crear en Canadá un nuevo concepto de las artes circenses en 1984, concibiendo una gala en la que la música, las coreografías y el más difícil todavía han cautivado al mundo.
Tras sus primeros títulos: El gran tour del Circo del Sol, La magia continúa, El circo reinventado y Nueva experiencia, cuentan en la actualidad con 22 espectáculos en el mundo, once de ellos permanentes en ciudades como Las Vegas (que se lleva la palma con siete espectáculos: The Beatles Love, Mystére, O, Viva Elvis, Zumanity, Criss Angel ‘Believe’ y Ká), Tokio (ZED), Macao (Zaia), Orlando, Florida (La Nouba) e Iris (Los Ángeles). Los demás son itinerantes (Ovo, Quidam, Saltimbanco, Totem, Varekai, Alegría, Corteo, Dralion, Kooza y Michael Jackson The Inmortal Tour) hasta once con el que presentarán en verano en Nueva York (Zarkana).
Con tanto show recorriendo el mundo desde hace 25 años, nos asalta la duda sobre las causas por las que ha quedado fuera de estas giras la isla de Gran Canaria, o Canarias en general. Siendo, como somos, uno de los principales destinos turísticos en España y Europa. De hecho, han sido muchos y vanos los intentos de los responsables municipales y de los organismos públicos en Canarias por traer alguno de los espectáculos a las Islas sin resultados, salvo la presencia de un par de artistas del Circo del Sol en el carnaval que la capital grancanaria dedicó al circo.


Pero... ¿Tiene Gran Canaria, además de la necesidad de espectáculos circenses de primera línea, alguna vinculación con estas artes? Sin lugar a dudas. De hecho, aparte de que siempre es negocio traer un circo a la capital (recordamos u extraordinario Circo Chino en el aparcamiento de Infecar, además de otros circos más ‘clásicos’) es en esta isla donde nació la mayor acróbata de la historia, la trapecista Pinito del Oro, la mujer que encandiló a los norteamericanos y a todo el mundo con su espectáculo estelar en el Ringling Bross. Tras dejar el trapecio, convertida ya en una gran estrella reconocida en todo el mundo, fundó en la capital grancanaria un museo particular que desaparecería con el tiempo, si bien su hogar en la capital grancanaria es uno de los espacios más importantes de las artes circenses en España, aunque en Albacete se vaya a crear el Museo Nacional del Circo.
Pinito del Oro, siempre genial

Asimismo, Pepa Luzardo, hace ocho años, consideró interesante la idea cuando le presenté el proyecto e incluyó en su programa electoral la creación de un Festival Mundial de Circo Pinito del Oro para la capital grancanaria. Una forma de reconocer el papel de nuestra gran artista y una posibilidad para crear un evento de invierno –con sus pasacalles y espectáculos de todo el mundo-. Pero la política tiene muchos caminos, algunos veloces y otros sinuosos que no llegan a la meta. Una ocasión perdida –y no porque Pepa no lo intentara, ya que llevamos a cabo varios intentos-, pero también una idea recuperable para lograr situar a la capital grancanaria en la esfera internacional del mundo de las artes circenses. Y eso, sin necesidad de que el Circo del Sol se apiade de nosotros y nos incluya entre las ciudades que considera rentables para su negocio…

miércoles, 26 de enero de 2011

Canarias. No apto para menores

Sioux City en Gran Canaria
Puede que la facilidad con la que se llenaban las camas de los complejos de apartamentos y hoteles tuviera la culpa de todo. O que no estábamos preparados para sueños Disney u otras aventuras. Lo cierto es que menos del diez por ciento de los turistas que llegan a Gran Canaria son menores de quince años. O sea, que no nos hemos preocupado por atraer turismo de familia a pesar de ser uno de los destinos 'seguros' más apreciados en Europa… Y es que a los chonis no les podemos decir que amarren a sus chiquillos a la pata de la hamaca, o que les matriculen en un Master de figuras de arena porque ellos, que para eso son niños, se aburren soberanamente de nuestro clima, el sol y la naturaleza macaronésica.
De hecho, las estadísticas nos dicen que a Gran Canaria llegaron entre septiembre de 2009 y el mismo mes de 2010 unos 318.000 turistas menores de quince años, mientras que los que superaban los 65 años fueron más de 464.000 (me imagino el catering del vuelo low cost cargado de bebidas para la tensión). Aunque las cifras, así contadas, parezcan importantes, niños y jubilados no alcanzan el 25% de los turistas que llegan a Gran Canaria… Pero tampoco es que atraigamos a los muchachos, en la edad del pavo… ya que entre 15 y 24 años, la cifra es similar a la de los niños.
No estamos ante un problema coyuntural, sino que seguimos enviando turistas para otros destinos ya que esos niños y jóvenes se harán mayores y cuando tengan descendencia no querrán ir donde sólo se atiende a los adultos clasificados en numerosos perfiles de turistas que, por muy segmentados y marketinizados que estén (que para eso nos gastamos un pastón en consultoras que se lucran con nuestra estupidez), esos estudios que se toman como dogma de fe no nos advierten de que hemos de apostar por el niño, el joven o la familia con niños.
No quiero decir con esto que no sea importante ni interesante el turismo adulto y sus diferentes variaciones. Pero siempre me ha llamado la atención el gasto que hacemos para buscar nuevos ‘mercados emisores’ y no atendamos uno de los sectores más importantes y de mayor consumo (no de copas, licores, tabacos y perfumes) que son los niños y jóvenes (juegos, parques temáticos, excursiones…). Así, sin contar lo que gastan los cabildos, ayuntamientos, Gobierno de España... sólo la empresa autonómica Promotur, destinó 95 millones de euros en 2010 a promocionar Canarias para atraer unos diez millones de turistas... 
O sea, como novedad nos metemos en ferias y acciones promocionales en los países de la antigua Unión Soviética, con idiomas que ningún camarero o empresario local conoce, gastándonos una pasta considerable…, pero no somos capaces de crear una oferta que haga venir a Canarias a los padres que quieren disfrutar de sus vacaciones con sus hijos y encuentren una oferta para la familia, para los niños o, incluso, para descansar mientras sus pequeños se entretienen sin tener que estar vigilándolos.
Puede que la tradición nos pueda, que nuestros orígenes como destino turístico de naturaleza y salud sea un sambenito difícil de quitar. Puede que esa obsesión por hacinar en hamacas a los turistas para que apenas puedan hacer otra cosa que darse vueltas al solajero, nos impida ver otras alternativas. Que esos museos que nos aburren, envejecidos y sin una chispa de diversión y pedagogía lúdica, sean intocables para nuestras mentes conservacionistas… Pero, lo cierto es que maltratamos a los niños.
En Gran Canaria, poco podemos ofrecer a los turistas con niños, sean padres o abuelos. Basta con visitar la página web del Patronato de Turismo para entrar un una profunda depresión. Castillos de arena y avistamiento de delfines (si se dejan ver), Aqualand y Palmitos Park son los únicos motivos para atraer el turismo familiar. Tenerife tiene una oferta un poco más atractiva (Loro Park, Siam Park, Aqualand, Parque las Águilas, Pueblo Chico...) pero tampoco es un destino para familia con niños.
Basta con echar un vistazo a los resultados de Disney World, que ya debe haber superado los 1.000 millones de visitantes desde su apertura en 1971 (Sioux City, en el sur de Gran Canaria, se construyó en 1972), con sus diversos parques temáticos y hoteles... Eurodisney, desde su creación en 1992 ha recibido 175 millones de visitantes...

lunes, 24 de enero de 2011

Iglesia y turismo en Canarias, del enfrentamiento a la cohabitación

Templo Ecunémico, Playa del Inglés

Siendo muy niño,  a mediados de los años sesenta del siglo pasado, contemplé una escena que no he podido olvidar. Estaba con mis padres en la playa de Agaete. El día era un cálido y hermoso día playero de agosto. Junto a nosotros se encontraba una pareja de turistas que estaban en la playa antes de llegar nosotros. Él, de forma natural, besó a la chica en los ojos. Nosotros no nos sentimos incómodos ni mucho menos. Pero algunas personas que se encontraban en el entorno no reaccionaron igual y se dirigieron hacia un policía local para que expulsara a los turistas de la playa. El policía preguntó a mis padres y le respondieron que sólo le había besado en los ojos, tras lo que intentó hablar con el turista sin entenderse entre ellos. Lo único que pudimos comprobar era que la mujer era invidente. El agente local pidió a los ‘denunciantes’ que fueran más comprensivos y tolerantes.
¿A qué respondía esa reacción de algunos isleños de aquella época? Evidentemente, el predominio de la iglesia católica durante siglos marca la educación y cultura moral extendida en España, lo que da lugar a un comportamiento en el que la mujer y lo carnal está bajo sospecha de pecado e impureza.  Una creencia que forma parte de la discriminación y dominación de género que durante siglos ha consolidado la sociedad machista con sus diferentes complicidades.
Pero la presencia de la iglesia ha trascendido a toda la esfera pública en el control moral, económico, político, científico, cultural y educativo, con instituciones como el santo oficio. Y Gran Canaria también en eso es un ‘continente en miniatura’; y no sólo en la variedad de sus paisajes, climas y ecosistemas. Su naturaleza y la posición de la Isla en el tránsito de personas, arquitectura, gastronomía, cultura e ideas, ha dado lugar a que una población pequeña y aislada sea el escenario para el enfrentamiento y la persecución de ideas científicas, históricas o literarias contrarias a la ortodoxia religiosa.
Ese enfrentamiento tiene su máximo exponente en el obispo José María Urquianona y Bidot, quien condenó públicamente la obra del médico y antropólogo Gregorio Chil  y Naranjo (Telde, 1831-Las Palmas de Gran Canaria, 1901), cuya formación médica en la Universidad de La Sorbona (París) le llevó publicar Estudios Históricos, Climatológicos y Patológicos de las Islas Canarias, donde asume los posicionamientos evolucionistas, motivo más que suficiente para la persecución religiosa. Sin embargo, a pesar de la iglesia, Chil y Naranjo es el artífice del desarrollo de la arqueología en Canaria al fundar en 1879 el Museo Canario. Otro de los protagonistas de la creación del Museo es el músico e historiador Agustín Millares Torres (Las Palmas de Gran Canaria 1826-1896). En este caso, el obispo arremetió contra las Biografías de canarios célebres porque trataba irrespetuosamente (según Urquianona) a las figuras religiosas de las Islas. A pesar de ello, Millares Torres publicó una segunda serie de biografías y la historia de la inquisición.
El siglo XX traería nuevos protagonistas, entre los que figura el controvertido obispo Antonio Pildáin Zapiáin (1890-1973, obispo de la Diócesis Canariense entre 1936 y 1966), quien tuvo su cruzada particular contra Benito Pérez Galdós, condenando a la excomunión a quienes promovieron y celebraron la inauguración de la Casa Museo del universal escritor canario en su isla natal.
Pildáin se enfrentaría a Franco porque el dictador iba a participar en un baile con motivo de la festividad de Santa Ana, patrona de la ciudad, actividad de la que era enemigo acérrimo el obispo y que no permitía el Concordato entre la Iglesia y el Estado, por tratarse de una manifestación festiva pagana. Y por ello, la visita a la catedral bajo palio del dictador quedaba anulada por incumplir el concordato, como hizo saber mediante un documento-homilía. Franco prefirió no asistir a la función religiosa. No sería su único encontronazo contra las decisiones del dictador. Pildáin actuó con determinación en defensa de sus convicciones, incluida la ayuda a los presos republicanos y para evitar la pena de muerte contra Juan García El Corredera.
También son los años de Manuel Fraga Iribarne como Ministro de Información y Turismo (1962-69), quien lanzó el lema ‘Todo por el turismo’ como necesaria fuente de ingresos y divisas para un país subdesarrollado y arruinado. Fraga llegaría al cargo en el momento idóneo para impulsar el turismo en Canarias en la época dorada de ‘Catalina Park’ y la playa de Las Canteras. Pero, desde su Radio Catedral, el Obispo Pildain, se manifestó contra la moda del baño de las suecas que atraía a numerosa gente apoyada en las barandillas de la playa de Las Canteras, contemplando los cuerpos de las turistas. Los ‘guindillas (agentes municipales) tuvieron que dedicarse a apartar a los mirones. Y el ayuntamiento terminó por quitar las barandillas y poner macetones con piteras.
El Obispo usó la radio para cargar contra las turistas: “¿Pero qué están contemplando nuestros buenos feligreses en la playa? Están contemplando el ir y venir de las olas sobre nuestras blancas arenas. ¿Y qué culpa tienen ellos de que sobre esas arenas haya tantas impudicias?”
Aún así, la política oficial tenía otro criterio. Un folleto editado por el Ministerio de Información y Turismo, bajo el título ‘España para usted’ (1964). Editado en siete idiomas (reproducido íntegramente en la revista ‘Isla’ del Centro de Iniciativas y Turismo de Gran Canaria, números 28, 29 y del 33 al 41), con descripciones como: “A los españoles, ya ve usted, nos suelen caer bien los extranjeros. Hasta a veces demasiado bien. Queremos decir que el español da con frecuencia mejor trato y concede mayor crédito -sin razones serias- al extranjero que al connacional”.
En cuanto a la religiosidad, señala que “la mayoría de los españoles profesan la religión católica. En su seno han sido bautizados, y ella les conforta a la hora de abandonar este mundo. Son muchísimos los que practican esta religión piadosamente durante toda su vida. Todos estos españoles y aquella minoría que no se considera católica, respetan la religión y tienen un profundo sentido espiritual, muy bien expresado en la historia y el arte de España. Existe un Concordato entre la Santa Sede y el Estado Español, que es un Estado católico”.
En el núm. 28 de Isla se publica una selección de párrafos del “opúsculo de propaganda editado por la Subsecretaría de Turismo”, en el que se recogen las opiniones en torno al vestido, bikini, puntualidad, siesta, signos externos, propina, tacos, piropo, amor, saludos, tabaco, tertulia, chateo y la despedida. Entre otras cosas cabe destacar las siguientes frases: “casi todos los españoles visten un poco mejor de lo que sus economías aconsejan. Sólo los millonarios o los indigentes se permiten, en este país, cierto desaliño indumentario”... “No crea usted en esas leyendas de que aquí montamos un auto de fe para quemar a los que van en ‘shorts’ por la ciudad o a las que usan turbador ‘bikini’ en la playa”... “Los españoles somos hipercríticos, amamos a nuestro país ‘porque no nos gusta’, y practicamos, de siempre, el catártico deporte nacional de hablar mal del Gobierno, sea el que sea”.
Luis María Ansón fue uno de los escritores que escogieron los responsables de Isla (núm. 29) para reproducir un comentario que publicó en ABC (13/1/1965), titulado ‘Oscuras afroditas’, en el que indica que el turismo ha solucionado el problema comercial del país, “Pero sería un error gravísimo reducir el problema del turismo a su sola dimensión económica. A mi me parece que el alud turístico que disfrutamos desde hace unos años es, sobre todo, tema para el estudio del sociólogo y del sacerdote. Porque el turismo creciente hará inevitable el contagio de costumbres. La juventud española, la masculina y en menor grado la femenina, comienzan ya a impregnarse de los hábitos extranjeros, algunos magníficos y otros incompatibles con nuestra moral tradicional”. De ahí que añada que “La época de vacaciones, máxime si se pasan en el extranjero, acucia el libertinaje, el desprecio por el escándalo y el deseo de satisfacer el placer, al precio que sea”, para advertir que “ya empieza a venirse a España todo ese haz de indeseables del ‘demimonde’, que constituyen la gran vergüenza de Europa... No son pues las costumbres europeas, sino las malas costumbres europeas, las que nos amenazan con el contagio”. Y todo lo dicho “nada tiene que ver con la beatería, la mojigatería y el pudor histérico, tan al uso en ciertas sacristías y fuera de ellas. Una cosa son las modas y otra la decencia. Una cosa es vivir al ritmo de los tiempos y otra la moral. Que venga, pues, el turismo en buena hora. De lo que se trata no es de escandalizarse al estilo de viejas beaterías agarbanzadas, sino de salvar las normas permanentes de nuestra tradición católica”.
Otra opinión publicada en Palma de Mallorca, bajo el título ‘Perspectivas religiosas del turismo’ por Gabriel Llompart (reproducida en Isla núm. 26), califica a los turistas como ‘las difíciles ovejas del Papa Juan XXIII’ y recoge las conclusiones del Congreso de Pastoral Turística de Trento (1962), en el que pone el énfasis para la atención de los viajeros, aprendiendo idiomas, celebrando misas por las tardes, salones “más bien neutros que confesionales”, “estar atentos a la moralidad de las playas. Llamar a la responsabilidad de los fieles. Advertir de los valores positivos de salud, educación y cultura de un turismo bien practicado”, y atender religiosamente “al personal del ramo de hostelería católico”.
Con motivo de la publicación de un número especial de la revista ‘Touring Club’ dedicado a Gran Canaria, incluye una entrevista con el entonces Obispo de Canarias (entre 1967-78), José Antonio Infantes Florido, quien hace una reflexión acerca de la comunicación entre las distintas comunidades y religiones que permiten comprobar “la esperanza común de los hombres en Dios, ayudan a descubrir las incógnitas que rodean el misterio humano”. En la apuesta de la Iglesia local se resalta el intercambio entre Canarias y la Península, ya que “existen otros vínculos históricos y culturales que determinan la fe de todos los canarios”, llegando a afirmar que la idiosincrasia del pueblo canario se manifiesta en lo religioso, y éstas muestras podrían ofrecerse al conocimiento del turista peninsular.
Hay en estas palabras un cambio de postura, un reconocimiento del proceso de apertura de España a una realidad europea y económica en la que el turismo se consolida como un elemento con el que han de convivir, lo que da lugar a que impulsara en Playa del Inglés un templo ecuménico, como reconocimiento de que muchos turistas también precisan de atención espiritual. Cabe destacar que este centro, obra del arquitecto Manuel de la Peña, abierto en 1972, es el primero de este tipo en España y Europa. De hecho, es el único, según nos comentan desde el propio templo, actualmente en restauración…
Pero la iglesia no sólo se ha abierto a los fieles, sino al negocio turístico, si bien no con tanta ambición como en otros lugares de Europa, donde te cobran por el acceso, unos plásticos para cubrir el cuerpo (si vas muy ligero de ropa), e incluso hay tiendas de souvenires en el interior de los templos. Aquí ya gestionan museos diocesanos, ascensores para ver la ciudad desde la torre… Todo sea para mantener un patrimonio y unos servicios a los más necesitados que la iglesia atiende secularmente.
Fátima o Lourdes son destinos turísticos religiosos que impactan a quienes acuden, bien por su fe o porque entran dentro de las rutas turísticas de esos países. Santiago de Compostela, ejemplo de senderismo religioso, El VaticanoTeror, Gáldar, Tunte… en la escala insular también son destinos de un turismo interior que hace décadas realizaban los grancanarios para cumplir son su devoción, si bien hoy día la facilidad de transportes los ha encadenado en una ruta de romerías y fiestas a las que acuden miles de jóvenes para disfrutar de la parranda, la verbena y de lo que surja, llegando incluso a las fiestas de los barrios más recónditos con su avalancha de trajes mezcla de tipismo y tenderete. Lo que no ocurre con la Semana Santa, el Corpus o los ranchos de ánimas, ya que los jóvenes se decantan más por la romería parrandera o el carnavalero y comercial Halloween.
Y es que, aunque se mantiene en vigor el acuerdo con la Santa Sede, España tiene una Constitución que ampara la libertad religiosa y la aconfesionalidad, pero es habitual que en los actos religiosos de la iglesia católica se den cita las autoridades civiles y militares, consolidándose como momentos de exhibición de la autoridad en un ritual que no tiene nada que ver con las obligaciones de quienes nos representan o defienden gracias a los impuestos que paga la ciudadanía, sea católica, budista o atea. Casi lo mismo que sucede cuando hay un derby futbolístico.
Hoy día, la iglesia se ha colocado en un segundo plano, en una sociedad en la que el poder económico que representa el fenómeno del turismo de masas hace muy difícil que los preceptos morales puedan ir contra corriente, a pesar de que ya se pueda practicar el nudismo en zonas delimitadas para naturistas, la sexualidad es uno de los elementos que conforman el sueño de las vacaciones y el turismo gay se presenta como un ‘producto’ para un segmento o perfil de clientes ‘de alto nivel de gasto’… Sin importarles el pecado… 

domingo, 23 de enero de 2011

Lo que Fitur dio de si

Hotel Coronita. La basura como inspiración
Ya decía que Fitur se promociona a sí mismo. Es una excusa para conseguir miles de visitantes a Madrid con la excusa de que así promocionan sus países y zonas turísticas en un escaparate profesional que, en realidad, es una demostración del centralismo que padecemos. Si no fuera en Madrid, no tendría los minutos de televisión que permite captar Fitur, aunque con tanto expositor en la feria es difícil conseguir unos segundos de gloria televisiva.
¿Qué hacen para evitar el ninguneo las autoridades canarias? Montar ficticias novedades que atraigan y den titulares a los periodistas canarios (porque poco interés tiene para la prensa especializada o peninsular los asuntos domésticos del turismo isleño). Y no es de extrañar que algunos medios vayan 'invitados' por algún organismo para que no falle esa entrevista o fotografía que justifique la presencia de un cargo político en un evento que se supone técnico. Y es que en Fitur hay en ocasiones más políticos que técnicos, para presentar un folleto, un vídeo o una página web... En otros momentos se celebraba una fiesta canaria que era la delicia de los que estudiábamos en Madrid y algunos amigos peninsulares que se quedaban asombrados con lo divertidos que éramos gracias a un desmadre subvencionado.
Lo cierto es que esa simbiosis de periodistas, políticos e Ifema, da de si muchos titulares, si bien ha tenido mucho más impacto nacional e internacional e día que se obsequió a los madrileños con una pirámide de plátanos canarios, o la idea brillante de la marca cervecera Coronita de presentar un 'hotel' con productos reciclados de la basura, cuyo impacto mundial ha sido sorprendente.
Pero, si quiere tener un resumen de lo que ha dado de si la presencia canaria en Fitur, tenemos de todo:


  • Tourespaña premia al Patronato de Turismo por mejorar la calidad del destino a través del proyecto Scted (Sistema Integral de Calidad Turística en Destinos) porque 42 empresas pasaron los filtros ‘exigentes’. Excelente noticia... ¿Y...? ¿El mérito es de las administraciones...? ¿Cuántas empresas no superan esos filtros?
  • El turismo nacional se estancará este año si Canarias no lo remedia durante la Feria Internacional de Madrid, Fitur, que abrió ayer sus puertas. Las aerolíneas han reservado 2,9 millones de plazas para volar desde la Península este verano, la misma cifra que en 2010, mientras que las internacionales crecen un «espectacular» 21%. Bueno, la culpa será de las aerolíneas y no de Canarias ¿no?
  • La alcaldesa del municipio tinerfeño de Granadilla, Carmen Nieves Gaspar Rivero, acompañada por el consejero de Turismo del Cabildo de Tenerife, José Manuel Bermúdez; la directora de Infraestructuras Turísticas del Gobierno de Canarias, Rita Enma Hernández, y la concejala de Turismo, María Candelaria Rodríguez González, han presentado un vídeo en tres dimensiones en la Feria Internacional de Turismo de España, convirtiéndose en el primer municipio canario en vender sus riquezas y bondades paisajísticas en 3D. Un formato novedoso ¿para…? Por probar que no sea...
  • El alcalde de Arrecife, Cándido Reguera, acude a Fitur por segunda vez como primer edil porque “Lo importante es asumir que la ciudad tiene oportunidades y tenemos que creer en ellas. Creemos y estamos dando pasos encaminados a que el valor se ponga de manifiesto. Se han hecho actuaciones, el mercado turístico artesanal, las nuevas oficinas de información o la nueva guía, que es mejorable, pero que es un principio. Además, estamos en la base de desarrollar infraestructuras fundamentales, caso del Palacio de Congresos; finalizar la Casa de la Cultura y el Castillo de San Gabriel, que estamos trabajando en ello; y contar con el muelle deportivo y el nuevo muelle de cruceros. Junto con el Islote del Francés y el Charco, vamos a crear a un conjunto para que todos los turistas tengan visita obligada a Arrecife.” O sea, todo es un veremos. Pero había que ir a Fitur a decir algo...
  • Ángel David Herrera González es concejal del área de  Turismo del Ayuntamiento de Arona, y es el responsable de la oferta que este municipio ofrece en la Feria Internacional de Turismo de Madrid,  Fitur 2011. Da el siguiente titular “En Arona las posibilidades son infinitas”. Y como el infinito es lo que es, no se puede resumir en algo concreto...
  • La alcaldesa de San Bartolomé de Tirajana, Mari Pino Torres, lleva a Fitur el mensaje de que la renovación del Sur está encaminada y que ahora hace falta también la participación del sector empresarial. Es un reconocimiento del fracaso del Consorcio y el tiempo tan precioso perdido. Pero bueno, ojalá sea cierto.
  • La isla de Fuerteventura ha aunado esfuerzos para acudir a esta edición de Fitur. El Patronato de Turismo, los ayuntamientos de la Isla y los representantes del empresariado turístico han definido las estrategias de actuación. La consejera de Turismo insular, Águeda Montelongo,  los concejales de Turismo de Pájara, Blas Acosta, y de Puerto del Rosario, Idaira Saavedra, así como los técnicos de turismo de los Ayuntamientos de La Oliva, Antigua y Tuineje, además de Antonio Hormiga, Presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Fuerteventura (AEHTF) han logrado un acuerdo por el que Fuerteventura repetirá los dos ejes fundamentales con los que asistió a Madrid el año pasado:  por un lado, escoger como pilar de la promoción de la Isla en este mercado el binomio turismo-deporte, y, por otro, volver a asistir al escenario de la feria toda la comitiva majorera bajo un único paraguas. Pues si, buena noticia la de la colaboración de todos, pero ¿cuántos deportistas podrían ir de turismo a Fuerteventura...?
  • Con unos movimientos de dedo sobre la pantalla de un iPhone se podrá planificar un viaje a Fuerteventura. La aplicación denominada `iFuerteventura´ y, según explicó Águeda Montelongo, está  disponible en cuatro idiomas y puede ser utilizada en terminales iPhone, en el reproductor musical iPod Touch o en el notebook de Apple, iPad. Se podrá descargar gratis a través del App Store. Cerca de los 100 millones de usuarios usan estos terminales en el mundo; en Europa la mayoría de usuarios están en Gran Bretaña, Alemania, Francia, Italia y España. El mundo es muy grande... ¿cuántos españoles tienen estas terminales? ¿Les interesará más ir a Fuerteventura porque se pueden planificar el viaje desde su ipad?
  • Francisco González, alcalde de Mogán: Nuestro objetivo es continuar trabajando para incrementar el número de visitantes nacionales a nuestro municipio. Debemos tener presente siempre la importancia de los turistas de España ya que no sólo podemos pensar en depender del turismo extranjero por eso, trabajamos para mejorar e incorporar en Mogán lo necesario para atraer a más turistas. Bueno, ya nos contará qué mejorará e incorporará... En Fitur se han quedado sin poder dormir por averiguarlo...
  • El vicepresidente primero del Cabildo de Tenerife y consejero insular de Turismo, José Manuel Bermúdez, ha destacado que "continuaremos siendo la isla que reciba más viajeros españoles en este ejercicio".  Bermúdez ha detallado en un comunicado que ello se debe a que "las plazas aéreas y el mercado se han reactivado para los meses de invierno, que es nuestra temporada alta, y el objetivo ahora es que en verano se afiance esa tendencia de crecimiento, lo que estamos convencidos de que nos hará superar las cifras de visitantes nacionales que recibimos en 2010". Además de comprobar que los tinerfeños tienen abuela, no me casa esta información con el dato dado más arriba de que se estanca el número de pasajes previstos por las aerolíneas.
  • La máxima prioridad del Gobierno de Canarias y los cabildos durante la Feria Internacional de Turismo de Madrid, Fitur 2011 es cerrar acuerdos que permitan garantizar que Canarias reciba «un millón más» de turistas durante este año respecto a 2010. Compañías aéreas tradicionales, turoperadores y aerolíneas de bajo coste europeas y nacionales están en el punto de mira de las administraciones públicas locales, que tratarán de cerrar acuerdos que llevan meses negociando. Se anuncian reuniones con Condor, Air Europa, EasyJet, Air Berlin, Air Nostrum y Vueling, así como los turoperadores Tui y Thomas Cook. Bueno, espero que la máxima prioridad sea permanente, ya que Fitur no deja de ser una feria y los contactos con estas compañías son constantes, no están esperando a que se celebre Fitur para tomar decisiones.
  • Agulo acude a Fitur para presentar la "Guía de Historia, Festejos y Recursos Turísticos de 2011", publicación que recoge las infraestructuras turísticas municipales, las tradiciones festivas y la gastronomía local. Esta guía muestra una relación extensa de las posibilidades de alojamiento turístico en Agulo, que incluye múltiples casas rurales, apartamentos y la próxima apertura de uno de los hoteles rurales municipales. ¡Agulo! Con 1180 habitantes censados... ¿Cuánto les habrá costado la guía y el desplazamiento a Fitur?
  • Incluso, Casa África se presenta en Fitur para promover el Foro de Inversiones Turísticas en África (Investour)
  • El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, firmó en Fitur un convenio de colaboración con el Instituto de Turismo de España (Turespaña); los Cabildos de La Palma, Fuerteventura y El Hierro, y la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel) y la Asociación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Fuerteventura para el desarrollo del Plan de Competitividad Turística Islas Canarias, Una experiencia volcánica II. La iniciativa –que se inició en 2009 con las Islas de Gran Canaria, Tenerife, Lanzarote y La Gomera- contempla ahora una ficha trianual de 2.300.001 euros que se invertirán a partes iguales en Fuerteventura, La Palma y El Hierro (766.667 euros entre 2010 y 2012 para cada una de las Islas). Habrá que ver el resultado de esta 'experiencia volcánica', los perfiles de turistas que se suman a los que venían visitando el destino de sol y playa...
  • El 40,9 por ciento de los empresarios turísticos canarios reconoce haber obtenido en 2010 menos beneficios que el 2009, año considerado como el 'más negro' de las últimas décadas para el sector tanto a nivel regional como nacional. Según la Encuesta de Clima Turístico presentada hoy por Exceltur, el 59,1 por ciento de los empresarios dedicados al turismo en las Islas sí reconoce no obstante haber logrado mejores resultados en sus balances durante el pasado ejercicio. Sin embargo, el mismo estudio revela que el 68,1 por ciento de los profesionales del sector incrementó las ventas de los paquetes y servicios ofertados por sus empresas frente a un 31,9 por ciento que aseguró no haber mejorado sus expectativas con respecto a 2009. Uno no sabe si alegrarse o echarse a llorar después de leer esta noticia.

Lo antes publicado está disponible en los especiales de Fitur publicados en La Provincia y Canarias7 en sus ediciones digitales. En Canariasahora, tendríamos otros titulares:
Iberia también contempla dejar de volar desde Tenerife. La compañía ha notado un descenso en las ventas de vuelos por la entrada en el mercado de las compañías de bajo coste.

  • Vueling y Spanair niegan su marcha de Canarias
  • Adeje anuncia la retirada de las aerolíneas
  • Los turistas nacionales gastan un 44% más
  • Tirar del turismo para diversificar la economía
  • Lopesan constata la recuperación de Europa
  • Paulino Rivero recuerda que ''no somos iguales''
  • ''Éste puede ser el año de la recuperación''
  • Canarias llega a Fitur con una agenda muy apretada
  • Las videoguías de Smartour estarán en Fitur

Los saraos que cada año se organizan en Madrid con motivo de Fitur no se diferencian  mucho entre sí y siempre se parecen a los de ediciones anteriores. Las fiestas, cócteles y ágapes variados que giran alrededor de la feria de turismo son una suerte de deja vu, un  eterno día de la marmota que oscila entre el glamour y la caspa.

jueves, 20 de enero de 2011

Para acabar con las '10 leyendas urbanas sobre el turismo en Canarias'

Este documento, elaborado por Fernando Sáenz-Marrero (socio director de EDEI Consultores) y Fernando La Roche (socio director de La Roche Consultores) nos invita a reflexionar sobre las numerosas leyendas urbanas que alimentamos sobre el turismo y a "poner en pie con legítimo orgullo las nuevas realidades que demanda la más importante industria de Canarias.
Ver documento en slideshare

miércoles, 19 de enero de 2011

Política turística en Canarias, el cambio necesario

Charca de Maspalomas, antes Oasis
La ya histórica vinculación de Canarias con el turismo me lleva a una reflexión acerca de las áreas políticas y administrativas a las que los representantes de la ciudadanía (me gusta más que decir ‘clase política’) establecen dentro de sus organigramas departamentales. Y no es asunto baladí porque tras esa conceptualización podemos intentar comprender las posibles intenciones que se tienen por parte de nuestros gobernantes acerca del turismo, el más destacado sector económico de las Islas Canarias, que no es poco…
No siempre el turismo estuvo en manos de políticos, aunque tampoco es reciente la lucha entre la sociedad civil y la maquinaria política y burocrática en su afán de recortar espacios de participación, ya que mucho antes de que todo lo relacionado con el turismo quedara en manos de la administración varios entusiastas grancanarios se volcaron en el progreso de la isla, para lo que crearon entidades como el Gabinete Literario o la Escuela Luján Pérez. Muchos de los personajes vinculados a estas instituciones promovieron la sociedad Fomento y Turismo en 1915, para potenciar un sector que hasta entonces estaba a cargo de un Comisario Regio de Turismo… Esta sociedad Fomento y Turismo fue disuelta en 1928 coincidiendo con la dictadura del general Primo de Rivera. En ese año se constituyó un Patronato Provincial de Turismo, cuya efímera existencia apenas dio resultados. En 1931 se creó la Junta de Turismo y en 1934 el Sindicato de Iniciativas, con la participación de un grupo de ciudadanos entre los que figuraban Fray Lesco y Néstor Martín Fernández de la Torre.
A pesar del largo periodo que discurrió desde la Guerra Civil, la Guerra Mundial y posguerra, el Sindicato se mantuvo y planteó diversas iniciativas -algunas peregrinas como la construcción de un aeropuerto en el actual barrio de Escaleritas-, y otras que quedarían para generaciones futuras como el Pueblo Canario o la Oficina de Turismo del parque Santa Catalina, fruto de la visión y liderazgo de Néstor. Este protagonismo de la sociedad civil no gustaba a la administración del momento –ni después de la muerte del dictador-, por lo que en 1950 la Junta Provincial de Turismo propuso la disolución del sindicato, lo que no se llevó a efecto por intervención del Gobernador Civil, si bien se obligó a coordinar los servicios, a establecer censura previa a la propaganda que realizara el Sindicato y a su revista ‘Isla’, así como a seguir las directrices políticas de la Junta Provincial y otras medidas.
En los años sesenta, el auge de los vuelos charter coincidiría con la celebración en Gran Canaria y Tenerife (noviembre de 1963) del congreso mundial de SKAL clubs, cuyo éxito haría posible la celebración en Canarias del primer congreso mundial de la Federación de Agencias de Viajes (FUAV) y de Expotur a finales de 1967, demostrando el dinamismo y capacidad de la sociedad civil (empresas y entidades ciudadanas) para desarrollar los más importantes eventos realizados en las Islas con una proyección internacional sin precedentes en España. El ‘boom’ turístico en las Islas fue espectacular generando una extraordinaria entrada de divisas por los visitantes y la inversión extranjera en las zonas turísticas.
Los setenta arrancaron con los graves problemas ocasionados por la crisis del petróleo y la transición política española (aquí agravados por la entrega del Sahara a Marruecos y el retorno de miles de canarios desde la antigua colonia), se inicia el proceso preautonómico con las Juntas preautonómicas presididas por dirigentes de la UCD: Alfonso Soriano Benítez de Lugo (1978), Fernando Bergasa Perdomo (1979), Vicente Álvarez Pedreira (1980) Fernando Bergasa Perdomo (1981), Francisco Javier Ucelay Sabina (1982), sustituido el mismo año por el socialista Jerónimo Saavedra Acevedo que accedería a la presidencia del primer Gobierno de Canarias en 1983. Es en este Gobierno cuando se crea la primera Consejería que gestionaría el sector turístico, dirigida por Dolores Pallicer, que incluiría salvo en alguna ocasión el área de Transportes como sucedería con Miguel Zerolo, Lorenzo Olarte, Juan Carlos Becerra, José Juan Herrera Velázquez, Manuel Fajardo y, en la última legislatura, nos encontramos con una Consejería exclusivamente turística con Rita Martín Pérez, cuyas competencias asumiría Paulino Rivero, presidente del Gobierno directamente con un viceconsejero al cargo del área, Ricardo Fernández de la Puente Armas.
La Consejería de Turismo conto con un ‘brazo ejecutor’ en la empresa Saturno (posteriormente, Promotur) que han puesto en marcha diversas iniciativas, desde una central de reservas a una red de hoteles y restaurantes escuela entre otras.
En el ámbito de los Cabildos la situación no era ni mucho menos satisfactoria. El 22 de octubre de 1975, la Mancomunidad de Cabildos volvió a crear el Patronato Provincial de Turismo, mientras se dejaba sin recursos y  actividad a entidades como el Centro de Iniciativas y Turismo (a la que sus miembros dedicaban su tiempo, ideas, análisis y dinero para colaborar en el desarrollo turístico de la Isla), negándole el espacio para el centro de información turística y ayuda económica para sus iniciativas.
En el caso del Cabildo grancanario, se crea el nuevo modelo de Patronato Insular en 1998, con la presidencia en manos del presidente insular y un consejero delegado, entre los que han figurado Jesús Gómez Rodríguez, Andrés Herrera Trujillo,Enrique Martín Cabrera, María Concepción de Armas Fariña, José Juan Cardona y Roberto Moreno Díaz, consejero de Turismo, Innovación Tecnológica y Comercio Exterior.
Caso aparte es el de Lanzarote, donde la presencia de César Manrique y su obra obligan a mantener un departamento para los Centros de Arte, Cultura y Turismo, si bien se mantiene aparte el Patronato de Turismo y el área de Cultura dentro de la Consejería de Educación y Cultura… Posiblemente un potaje de competencias repartidas en distintas áreas del organigrama cabildicio.
Esta realidad nos lleva a plantear la cuestión de la siguiente forma: si Néstor Martín Fernández de la Torre y César Manrique demostraron que el turismo en Canarias ha triunfado gracias a reunir los elementos culturales, artísticos y el tratamiento del paisaje… ¿Por qué nuestros gobernantes no intentan continuar por esa línea? ¿Es tan peregrino que se creara la Consejería de Turismo y Cultura, dejando Transportes para Obras Públicas…? ¿No se contribuiría de esa manera a relanzar Canarias como destino con nuevos productos que permitan poner freno al ocaso de un modelo agotado? ¿Cultura no queda limitada al quedar bajo el ‘paraguas’ de un organismo ‘academicista’ y ‘reglado’?
Cierto es que el turismo es una actividad transversal, un sector que tiene que ver con numerosas áreas de gestión política y que –además- en Canarias debería estar en el nivel máximo de gestión política de nuestros gobiernos locales, insulares, autonómico y, sobre todo, con un apoyo mucho mayor por parte del Gobierno del Estado. Pero no… Aquí el turismo tiene que ver con el transporte y se relega a partidas presupuestarias casi simbólicas en comparación con su peso en el PIB, cuando todos reconocen que es la ‘locomotora’ que tira de la economía de Canarias, como bien han comprobado algunos alcaldes y técnicos locales que convertido su patrimonio en escaparate vergonzoso de su enriquecimiento ilícito (con un sistema judicial que durante décadas ha mirado hacia otro lado).
el turismo en Canarias ha sido impulsado por la sociedad civil y, fruto de ese apoyo social, logró la implicación de artistas que pusieron en valor los recursos intangibles culturales, nuestro clima y naturaleza para convertir Canarias en uno de los lugares que más turistas atraen de Europa. Sin embargo, la obsesión de la politocracia y la burocracia ha sido apropiarse del tópico del ‘sol y playa’ para justificar su mediocre balance mientras desmantelaban todo el apoyo social –con su altruismo y actitud crítica, errores y aciertos- para llevarnos a un estado vegetativo y al borde del precipicio. Una situación ante la que tendremos que invertir grandes sumas de dinero a través de consorcios de rehabilitación que usan del concurso público para copiar soluciones de otros lugares, sin originalidad ni imaginación, e intentar seguir recaudando impuestos hasta que se hunda la nave, definitivamente.
Por eso, es necesario y urgente cambiar el modelo. Revisar todo el sistema y abrir ventanas y puertas para que la sociedad empuje de nuevo en busca de un destino turístico que ilusione a la ciudadanía y nos sitúe como un destino en este nuevo paradigma global e interconectado.

domingo, 16 de enero de 2011

Fitur y el pasteleo VIP canario

Un 'peregrino' promociona el Xacobeo y una chica 'el clima' canario

La semana que viene tendrá lugar la Feria Internacional de Turismo en Madrid (Fitur) del día 19 al 23 de enero. Desde su creación en 1980, se ha consolidado como un evento que junto a la ITB de Berlín y la WTM de Londres, atraen más expositores (países, ciudades, regiones, empresas) que pretenden dar a conocer su oferta turística.
Sin entrar a discutir por qué no se celebra Fitur fuera de Madrid para que sirva de promoción de otros destinos en el país (por ejemplo en las Islas, ya que sólo Canarias recibe el 25% del turismo que visita España), hemos de recordar que en los orígenes de este tipo de ferias destaca la realización a finales de los sesenta de ‘Expotur’ en las Islas, coincidiendo con la celebración de la I asamblea mundial de la FUAV (fusión de la Federación Internacional de Agencias de Viajes y de la Universal Organization of Travel Agents Association), que fue inaugurada por el ministro de Información y Turismo, Manuel Fraga Iribarne, el 6 de noviembre de 1967 en el Teatro Pérez Galdós y clausurada en Tenerife, mostrando al mundo nuestra apuesta y valores turísticos en aquel momento. Si comparamos con la actualidad, entonces sí que fue un éxito promocional…
De hecho, las ferias de turismo, tal como las entendemos hoy día tienen origen en el mismo año, con la celebración de la ITB, en la que apenas participaron 65 expositores de 35 países y 1250 profesionales y expertos (en Fitur 210, se dieron cita 10 966 empresas expositoras de 166 países/regiones, 124 644 profesionales participantes y 7352 periodistas).
Pero bueno… lo que nos trae aquí es lo que Canarias lleva a Fitur (y por extensión las demás ferias internacionales de turismo).  Una presencia que tiene que ver con las cinco preguntas típicas del periodista: el qué, dónde, cuándo, cómo y por qué… Pero yo me voy a centrar más en una sexta, el cuánto nos cuesta a los ciudadanos para los logros que deberíamos alcanzar de nuestra presencia: llenar las camas turísticas y los establecimientos de ocio, para que el visitante deje riqueza y haga circular dinero en nuestra economía.
Si vemos los resultados, las estadísticas están ahí, las ferias ya no son el lugar para impulsar nuestro turismo. Fitur se ha convertido en un escenario de vanidades, en una excusa para muchos alcaldes, concejales y políticos, junto a algún que otro funcionario, que acuden a Madrid a realizar un gasto de dudosa justificación, como alguno que sólo ha acudido a Fitur para llevar los nuevos folletos de su pueblo, cuando podrían haberlos enviado por mensajería o a través del Patronato Insular de Turismo o la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias.
El colmo de la burla al contribuyente es llevar a Fitur la campaña de la candidatura de Las Palmas de Gran Canaria 2016 como capital de la cultura. Un gasto inútil para una campaña que tiene que cubrir otras exigencias (si en realidad se quiere conseguir ese objetivo) pero que sólo se utilizará para que el alcalde de la capital grancanaria sigua aprovechándose de ese sueño para su campaña personal. Y es que sólo a los españoles se nos ocurre promocionar una cosa que no hemos conseguido, y lo digo porque el resto de candidaturas también llevan a Fitur su sueño o sus ganas de gastar dinero inútilmente. ¿O será que no tenemos otra cosa que promocionar que proyectos sin aprobar con visos de campaña electoral?
O sea, que si sumamos lo que gastan los ayuntamientos, cabildos, gobierno de Canarias…, nos encontramos con un gasto que podría ser reducido a la cuarta parte y lograr un incremento de la efectividad, o mejor aún: dedicarlo a mejorar las infraestructuras y el modelo turístico, pero eso no es lo que preocupa a quienes se creen bendecidos por la varita mágica de los votos. Lo que pasa es que Canarias (y sus islas y municipios) no sólo van a estar presentes, sino que llevan en torno suyo a una corte de personajes de todo tipo que hacen del pabellón canario un continuo saludar endogámico. También se incluye un programa de presentaciones y ruedas de prensa, las cuales se podrían realizar en las Islas Canarias, pero claro, hay que decir en Madrid lo que interesa sólo a los canarios y, así, parece que es más cierto o importante. De hecho, se llega a pagar a los medios de comunicación para que vayan a Fitur… ¿para? Como no sea para decir que el pabellón que costó 1,1 millón de euros (doscientos millones de pesetas) y ganar el premio al mejor pabellón, pero dudo que eso llene hoteles con clientes con alto nivel adquisitivo.
De hecho, al final lo único que quieren es usar Fitur como escaparate para aparentar que el turismo en Canarias evoluciona gracias a su labor política y administrativa, cuando la realidad es que apenas han ayudado al sector y que el resultado de más de veinte años de autonomía y de gasto de cientos de millones de euros en promoción (salvo alguna aportación sorprendente) nos ha dejado un modelo agónico por factores internos en los que tiene mucho que ver la ineptitud de parte de nuestra ‘clase’ política y la prepotencia de algunos que acceden a puestos en los organismos públicos mediante el mérito familiar o partidista, sin que el empresariado participe en la dirección efectiva de esos entes, que para eso ya están los políticos altamente cualificados (permítanme ironizar) para dirigir el sector económico más importante de Canarias y del que depende el presente y futuro de nuestra sociedad.
Muchos dirán estos días: “Nos vemos en Fitur” con cierta alegría. Y es que se lo pasan muy bien… Pero es hora de analizar en profundidad nuestra promoción turística, porque lo que en realidad se promociona en Fitur es Fitur y dejémonos de tonterías.

sábado, 15 de enero de 2011

Plantas medicinales para la salud del turismo en Canarias

Hoja de aloe vera
Un amigo me comentaba asombrado que en el popular programa de televisión CSI (no sé cuál de ellos, ya que la investigación forense criminal en USA -donde la Constitución ampara el uso de armas- da para mucho: Miami, Las Vegas, Nueva York…) uno de los actores comentaba que entre los productos que se habían elaborado para capturar huellas digitales, ninguno superaba la sangre del drago. Una planta originaria de Canarias, territorio al que identifica internacionalmente y que ha sido representada en obras tan conocidas como el Jardín de las delicias, de Hieronymus Bosch (El Bosco).
Otra planta canaria con gran éxito internacional es el aloe, la ‘pomada canaria’ como lo conocen en Hispanoamérica, donde fue introducida por Cristóbal Colón que incluyó esta planta en el botiquín que llevó desde Canarias al nuevo mundo, territorios a los que llegarían también desde Canarias la caña de azúcar y el plátano, entre otros.
Actualmente, el aloe canario goza de una extraordinaria reputación. Su indiscutible acción frente a quemaduras o problemas en la piel hace de esta planta un elemento habitual en las viviendas y espacios libres de nuestras islas para echar mano de ella en cuanto se necesite, así como uno de los productos más demandados por los turistas; si bien la falta de apoyo y control de las instituciones que dicen defender a Canarias y a España, ha dado lugar a la proliferación de listillos que importan polvos y los mezclan con agua o cualquier otra sustancia para venderlo con la etiqueta de aloe canario, dinamitando el prestigio de la planta canaria. Otro ejemplo, sangrante, es el de los champús, jabones, yogures y otros productos que afirman contener aloe, cuando en realidad, están añadiendo productos importados desde lugares donde la planta no tiene –ni por asomo- los principios activos que logra el aloe en Canarias por su temperatura y horas de sol…
Este problema no sólo atañe a las empresas productoras y transformadoras del aloe canario, ya que este es un producto muy demandado por los turistas y no es extraño encontrar puestos de venta de aloe en las zonas turísticas de nuestras islas, incluso se realizan visitas a las zonas de plantación y transformación. También se está utilizando el aloe canario en spas y centros de masaje con un gran éxito. Toda una industria floreciente que puede irse a la porra.
Pero ¿Canarias sólo tiene el drago y el aloe? En absoluto… “Canarias es un centro de endemismos vegetales de interés mundial. Es un territorio de alta biodiversidad en cada una de sus Islas, en su Archipiélago y en su entorno macaronésico. La flora canaria se compone de 2469 plantas vasculares de las cuales 528 son endémicas del Archipiélago” (Cluster de aloe vera, biodiversidad y plantas medicinales de Canarias. Cabiomed). Los profesionales y empresas del sector advierten que este alto número de endemismos "no refleja los ya desaparecidos para siempre, ni que el 75% de la flora canaria endémica se encuentra amenazada, fundamentalmente por la presión humana y urbanística, así como por actividades relativas al turismo alternativo que comienza a presionar con peligro en zonas medias y altas, hasta ahora menos afectada”.
Durante siglos, desde que aparecen los primeros textos de historia y los mapas en Europa, estas islas fueron consideradas el paraíso, el lugar escogido para la salud y el bienestar. Todo esto se puede ir al traste si no somos conscientes de que hemos de rescatar, defender y promocionar la industria biotecnológica y el aprovechamiento de nuestros endemismos con una economía sostenible. Si no lo hacemos nosotros, otros lo harán, engañando a la gente, ya que los endemismos canarios de dan en Canarias y esta tierra es donde mejor pueden desarrollar sus propiedades y principios activos.
Si considera que este asunto es de su interés, le sugiero acudir a estas jornadas:

martes, 11 de enero de 2011

La crisis del modelo turístico canario

Aunque algunos tiren voladores por los datos del último año, la crisis turística es profunda y, encima, hemos de reconocer que la originan factores internos.
No podemos cargar las culpas de la situación a la crisis financiera de las hipotecas ‘subprime’ (que reventó en agosto de 2007), o las estafas piramidales de Forum Filatélico (mayo de 2006) o Madoff.
Aunque es cierto que la crisis internacional se ha instalado en España (no sólo en Canarias) y llega a todos los rincones de nuestra economía, en realidad afecta al sector de la construcción que no encuentra en la actividad del sector turístico una salida para su parálisis casi absoluta.
No voy a volverles locos con argumentaciones complicadas. Les he elaborado un gráfico en el que incluyo tres variables en el periodo comprendido entre 1995 y septiembre de 2009 (momento más dramático de la crisis para el turismo en Canarias):
  • Número de turistas registrados en Canarias
  • Número de camas hoteleras en Canarias
  • Índice de ocupación hotelera
Los datos son públicos, los pueden encontrar en las páginas de Internet de la Consejería de Turismo del Gobierno de Canarias o del Instituto Canario de Estadística y, una vez cruzados, nos encontramos con una realidad: el crecimiento del número de turistas llegados a las Islas era sostenido y un poco mayor que el de alojamientos hoteleros. Sin embargo, a pesar de aumentar el número de turistas, llegó un momento fatídico: el año 2001, en el que la ocupación hotelera entró en caída, por debajo del 77%. De hecho, 2009 culminó con un índice del 61,7% y 2010 con una recuperación hasta alcanzar  el 63,8. Estos datos suponen que hay temporadas y zonas en las que mantener abiertos los hoteles cuesta dinero a sus propietarios.
Es cierto que la crisis ha influido, al igual que el volcán islandés, las alertas meteorológicas o los controladores aéreos… También es cierto que la estancia media ha caído de doce días a siete días. Pero el principal causante de esta situación es el exceso de oferta de camas hoteleras. Y el dato está ahí:
En 1996, Canarias contaba con 126.766 camas hoteleras. En 2009 alcanzaron la cifra de 186.628. Los crecimientos en porcentajes se dieron en todas las Islas Canarias: Fuerteventura (un 229% más), La Palma (un 159% más), Lanzarote (un 112%), Gran Canaria (45%) y Tenerife (31%).  Cada nueva cama hotelera (y no cuento aquí la oferta extrahotelera) necesita de 47 turistas más al año… Hagan los cálculos…
Evidentemente, la oferta no era la misma en cada Isla, así tenemos que el principal perjudicado en Gran Canaria era el sector extrahotelero (apartamentos y bungalós), si bien la crisis de este subsector ya venía coleando por el cambio de hábito de los visitantes y ha dado lugar al esperpento que hoy día es Playa del Inglés o Puerto Rico.
Como podemos leer en cualquier manual, recuperando descripciones de otras épocas de crisis, nos encontramos con una situación de sobreoferta y la consiguiente bajada de precios, lo que unido a la disminución del número de turistas por diversas causas consabidas (competencia de otros destinos, degradación del medio ambiente, falta de una oferta de ocio diferenciadora, precios caros en restaurantes y productos de consumo…) y nuevas (nuevos modelos de ocio y comunicación, crisis e inestabilidad internacional, nuevos operadores más agresivos en el transporte y la intermediación…), el resultado es que estamos ante una nueva crisis, si bien en esta ocasión se debe más a factores internos (defectos en la oferta canaria) que externos.
Así, sin menospreciar nuestro excelente clima, cada día aparecen nuevos destinos que compiten con nuestro territorio y ¿qué hemos hecho para mejorar la oferta? ¿Tenemos algún parque temático o hito que pueda posicionarnos en la oferta global como un destino atractivo? En Gran Canaria tenemos una oferta museística desfasada; una oferta de parques temáticos reducida y anticuada (parques acuáticos, Sioux City, Palmitos Park…) y llevamos años con aventuras que no se materializan (circuito de Fórmula Uno…) mientras seguimos aumentando la oferta de camas y de centros comerciales que se convierten en escenarios vacíos.
El resultado es obvio: el modelo está agotado y no hay visos de cambio. Y no es que no haya ‘materia gris’ para producir un revulsivo. Hace un siglo, Néstor dio un paso de gigante con su modelo centrado en el tipismo. Hace medio siglo, César volvió a sorprender al mundo con su modelo de recreación artística de la naturaleza de las Islas. Y hoy muchos canarios tienen propuestas para el nuevo paradigma, pero la mentalidad empresarial y/o administrativa prefieren mantener al paciente en la UCI porque son otras variables las que les motivan.

domingo, 9 de enero de 2011

En la muerte de un empresario turístico: Ángel Luis Tadeo

Ángel Luis Tadeo

Ha muerto Ángel Luis Tadeo, el impulsor del Grupo Dunas, una organización empresarial  con unos veinte años de presencia en nuestras islas, principalmente en Gran Canaria. Arquitecto técnico de formación, decidió después de mucho trabajar en complejos turísticos emprender por su cuenta, creando un grupo que da trabajo a unas 20.000 personas en las Islas. Es el primer empresario de la nueva generación turística de las Islas que fallece, lo que nos permite realizar un análisis del cambio vivido en los últimos años en el sector turístico canario.
Hay que señalar que con más de un siglo de desarrollo turístico en Gran Canaria, la presencia de empresarios de la isla se hace notar tan sólo en las últimas décadas. Podríamos incluso afirmar que es la herramienta de la Reserva de Inversiones de Canarias (RIC) la que facilita y potencia la capitalización de empresas canarias para que puedan hacerse con el control de una parte del negocio turístico en las Islas, hasta entonces en manos de empresas foráneas (extranjeras, mallorquinas, catalanas…). Es esta herramienta fiscal –aprobada por la UE en 1994 junto a la ZEC- la que da un giro de 180 grados al insuficiente Régimen Económico y Fiscal con que dotó el franquismo a Canarias en 1972.
De hecho, la política económica del franquismo y, anteriormente, las iniciativas emprendidas por la metrópoli colonial –desde el momento mismo de la colonización con el Fuero Real hasta los puertos francos- tenían como objeto potenciar el papel de plataforma portuaria y comercial de las Islas para evitar su desabastecimiento, su incomunicación y su ruina económica. Sin embargo, estas medidas no beneficiaban a los canarios, sino por el contrario a aquellos con capital suficiente para hacerse cargo de esas ventajas en su propio provecho y, en algunos casos, por el interés de las Islas.
Así, a la sombra de los empresarios británicos y alemanes, interesados en nuestras Islas por la necesidad de comunicar sus países con las plazas coloniales, “los comerciantes isleños arribaron al núcleo portuario lentamente. Consignaban un número reducido –cuando no insignificante- de vapores, casi siempre españoles, que aportaban una pequeña proporción del total del tráfico marítimo; actuaron mediatizados por las firmas extranjeras; dependieron de ellas en el abastecimiento de carbón a los barcos, que era el principal negocio del Puerto; realizaron escasas inversiones en obras de infraestructura portuaria; y, de modo general, desempeñaron un papel secundario en el despegue portuario”, según concluye el investigador Francisco Quintana Navarro, en su obra ‘Barcos, negocios y burgueses en el Puerto de la Luz. 1883 – 1913”.
Quintana añade que “la dinámica del Puerto pudo alimentar todo tipo de negocios y, al amparo de las grandes empresas extranjeras, creció y se desarrolló la burguesía portuaria de Las Palmas; una burguesía nada emprendedora, más bien oportunista, dispuesta a no desaprovechar la inmejorable ocasión que se le presentaba y recoger los frutos –muchas ‘migajas’ y alguna ‘tajada’- del crecimiento portuario”. Y así ha sido con alguna excepción hasta nuestros días, si bien también hay que señalar la intervención de la clase media rentista que se abalanzó en los años sesenta y setenta a la compra de apartamentos y bungalós que amortizaban rápidamente por la gran demanda turística que se produjo con el auge de los chárter.
Pero el negocio, el hotel, continuaba en manos foráneas, y poco a poco el turoperador nórdico fue implantando sus criterios y sus condiciones a medida que crecía una oferta de alojamientos sin control y amparada en la especulación y el desorden que, asimismo, favorecía el caldo de cultivo de la corrupción.
Sin embargo esto cambió. Desde hace unos años –pocos, pero de forma intensa- empresarios canarios se han hecho con gran parte del negocio hotelero de las Islas, e incluso con hoteles en centro Europa y con parte de grandes turoperadores. Pero no estamos ante un perfil de empresarios muy alejado del deprimente cuadro que retrata Quintana en su obra. A pesar de sus incursiones en actividades relacionadas con el progreso social y económico de su tierra, estos empresarios venidos de la construcción, el comercio minorista y de actividades vinculadas al desarrollo de infraestructuras, siguen padeciendo los mismos males de hace un siglo, como fieles ‘herederos’ de esa burguesía portuaria que, con excepciones, se ha caracterizado por ser exigua (un reducido y excluyente número de individuos), frágil, intermediaria y sucursalista, dependiente, interesada en el ascenso social y elitista.
No obstante, estamos en una etapa distinta. Hay rasgos de superación de esa dependencia del capital foráneo y hartazgo de esa ‘libertad bajo custodia’ que permitía un cierto acomodamiento del empresario en una situación que “a fin de cuentas, ni le impedía progresar económicamente, ni le cuestionaba su prepotencia política y social en el marco insular”, concluye Quintana, si bien en estos momentos ese marco insular es un límite muy estrecho para las capacidades inversoras y de expansión empresarial del capital canario.
Otra cuestión que queda pendiente es el papel social del capital en las Islas. Lejos de innovar y crear una oferta diferenciadora (un modelo Néstor, o César Manrique, si bien adaptado a la actualidad y a las posibilidades de las Tecnologías de la Información), estos empresarios crecidos en la RIC sólo han aportado nuevas construcciones de hoteles y centros comerciales. Eso sí, de gran calidad y muy lejos de los improvisados equipamientos desde hace cincuenta años hasta hace muy poco, ya obsoletos y fuera del mercado casi en su totalidad.
Lejos de buscar en el espíritu (y conocimiento) del canario, estos nuevos capitalistas se guían en muchos casos por asesores venidos de fuera que nos importan modelos y planos repetidos en casi todo el mundo, haciendo perder valor a la marca canaria. Quizás sea porque su crecimiento ha sido muy veloz, porque su nivel no alcanza a entender que la globalización no va reñida con la originalidad y la identidad para posicionarse en el mundo… O que vivimos en un entorno excesivamente controlado por la politocracia y la burocracia, degeneración de la democracia y que repudian de los esfuerzos de una sociedad civil que no quiere vivir encorsetada ni dirigida por vividores de los fondos públicos.
Lo dicho, es una lástima que Tadeo falleciera tan joven, cuando empezaba a vislumbrar otras opciones de desarrollo de su actividad empresarial en unas Islas a las que entregó su vida, creando riqueza para muchos y creyendo en su potencial. DEP

miércoles, 5 de enero de 2011

50 aniversario de Maspalomas Costa Canaria

Portada del concurso internacional de ideas
En verano de 1960, el Conde de la Vega Grande de Guadalupe, Alejandro del Castillo y del Castillo, anunció a determinados colectivos sociales de Gran Canaria el proyecto de abrir un concurso de ideas para la urbanización de 1060 hectáreas con una longitud de costa de 19 kilómetros en el sur de Gran Canaria, con el nombre de Maspalomas Costa Canaria. Sería el primer concurso internacional de ideas para construir una ciudad turística en el enclave natural de playa más atractivo de Europa.
Varios meses de trabajo y estudios dieron lugar a un documento que se remitió a comienzos de 1961 a la Unión Internacional de Arquitectos (UIA) y a todos los colegios profesionales de arquitectos para que lo trasladaran a sus colegiados. El nombre de Maspalomas Costa Canaria se extendió por el mundo y despertó el interés por crear un modelo nuevo y de prestigio para un enclave único y paradisíaco.
Los objetivos principales del concurso contemplaban:

  • La disposición del complejo urbanístico debería contemplar planes completos y de desarrollo urbano dentro de un plan general.
  • Cada sector debería tener una edificación adaptada al uso o carácter de la zona.
  • Elaborar un sistema de red viaria y enlaces con la carretera de acceso.
  • Disposición y ordenamiento de centros cívicos, educativos, comerciales, deportivos, balnearios… y otros que el concursante considerara conveniente su instalación.

Los tres premios incluían parcelas, viajes y estancia, y cantidades económicas de trescientas, doscientas y cien mil pesetas. El plazo de entrega de proyectos finalizó el 1 de diciembre de 1961. El jurado estuvo compuesto por los arquitectos Pierre Vago (secretario general de la UIA), H. Van den Brock, Franco Albini. Luis Blanco Soler, Antonio Cepaña Sebria y Manuel de la Peña Suárez.
Se inscribieron 140 equipos de diversas nacionalidades, presentándose 80 proyectos. El primer premio fue concedido a un equipo multidisciplinar francés dirigido por el arquitecto y urbanista Langueneau y Michel Meill, economista. El segundo premio quedó desierto y hubo dos equipos (uno belga y otro francés) que obtuvieron el tercer premio, aparte de varias menciones honoríficas.
Hay que reconocer que el papel del Conde en la sociedad grancanaria fue muy destacado, impulsor junto a otros prohombres de la isla de diversas iniciativas que permitieron superar su postergación desde la capital provincial (en SCTF) como fue el Gabinete Literario o el instituto de San Agustín, o con aportaciones generosas para los problemas de hambre, la leprosería e incluso para la puesta en marcha del Festival de Ópera de Las Palmas de Gran Canaria, uno de los más longevos del país con 44 ediciones en su haber.
El proyecto de Maspalomas Costa Canaria supuso varios cambios en nuestra sociedad. Finalizaba la época de esplendor del turismo en la capital, provocando la decadencia de los numerosos hoteles y apartamentos que colmataron la zona de Las Canteras y el entorno bohemio y agradable que se había conformado en el parque Santa Catalina (de esta etapa basta leer la novela ‘Catalina Park’ de Orlando Hernández, para conocer el proceso de degradación que sufrió).
También supuso el fin de proyectos peregrinos de convertir la capital grancanaria en una ciudad tipo Mónaco o ribera mediterránea, con grandes hoteles lujosos y casinos. O el divorcio definitivo del proyecto de Néstor Martín Fernández de la Torre, quien frente a la tradición turística de invalids y health resorts que caracterizaron el turismo decimonónico, abogó por el tipismo y lanzó proyectos para la capital y las cumbres, con ideas avanzadas para Maspalomas… Pero nadie secundó su propuesta en el concurso internacional de ideas y mucho menos iban a hacerlo los equipos de arquitectos de países donde no tenían ni idea de dónde estaba Gran Canaria y lo que se había hecho (y malogrado por la guerra) por el turismo.
Ni que decir tiene que el desarrollo del proyecto de Maspalomas Costa Canaria fue desbordado desde sus comienzos por la gran demanda que produjo la irrupción de los vuelos charter en el sistema de transportes, arrinconando para siempre las largas y novelescas travesías en barco. Los protagonistas del momento recuerdan que el proyecto dio paso a construcciones que tan sólo tenían en cuenta la capacidad de asientos de los aviones, lejos de cualquier planificación urbanística prevista por los concursantes y con una administración municipal encandilada por las enormes divisas e intereses económicos que se movieron en torno al desarrollo de Maspalomas Costa Canaria.
Como ejemplo, cabe destacar que los ingresos por licencia de obras en San Bartolomé de Tirajana pasaron de 332 pesetas en 1957 a 434.466 pesetas en 1966. En ese año, existían en el citado municipio 1826 camas turísticas que daban trabajo a 840 personas. La urbanización había costado 95.864.000 pesetas y las construcciones se habían realizado gracias a la inversión de 957 millones de pesetas. En apenas 9 años Maspalomas Costa Canaria contaba con el triple de camas turísticas que tenía toda la provincia de Las Palmas en 1957. El turismo reportaba a la provincia dos mil millones de pesetas en 1966 (datos publicados en la Memoria de la I Asamblea Provincial de Municipios Turísticos. 1967-68)
Este año se cumplen 50 de aquella idea, aquella aventura que impulsó uno de los más adelantados (y comprometidos con su tierra) hombres de Gran Canaria. Hay un antes y un después en la Isla, con un crecimiento económico extraordinario, pero también con un auge de la especulación, la corrupción y el deterioro ambiental, al encontrarse con una sociedad desvertebrada y cuya ambición desmedida no entendía de planes ni proyectos de futuro.

Lanzarote, Manrique en erupción

César Manrique en su estudio
Esencia de la Tierra, retorcida e hiriente, creada en las fraguas de Vulcano. Así es el paisaje original de Lanzarote, la isla de los volcanes, un panorama que atemorizó al visitante durante cientos de años y que la mano del hombre transformó para extraer de ella sus mejores frutos, para convertirla con la genialidad de César Manrique en un bello escenario donde conviven tierra y mar, destrucción y origen, un cataclismo en reposo.
Hay tres elementos o momentos que resumen lo más llamativo de la isla de Lanzarote: un volcán de 5000 años de antigüedad que corona el norte de la Isla y que hunde sus raíces en espectaculares tubos volcánicos, galerías o jameos subterráneos; otra pieza que surgió en 1730 es la dantesca línea que se abrió al oeste, por la que el fuego y la lava escaparon de las profundidades para recrear el infierno ante nuestros ojos; y un artista, César Manrique (1919-1992), capaz de recrear los aspectos más sutiles o dramáticos de la naturaleza y el paisaje para convertirlo en uno de los espacios turísticos con más personalidad y belleza del planeta.
Lejos de copiar artificiosos elementos para distraer al turista, Lanzarote es un ejemplo de preservación de lo propio, integración, cuidado, atención del mínimo detalle… gracias a una cultura del aprovechamiento que ha caracterizado al conejero (habitante de Lanzarote) a lo largo de su historia, obligado a sacar el máximo partido de los escasos recursos de la Isla y superar las dificultades para sobrevivir en un territorio de una dureza y sequedad extraordinarios.
La simple contemplación de los millares de diminutos cráteres horadados por los isleños durante siglos, sorprende al visitante, incapaz de entender que esa fue la única manera de recuperar el suelo fértil cubierto de lapilli de los volcanes. Una solución que permitió proteger las vides e higueras del viento y, a la vez, conservar la escasa humedad que el alisio y la proximidad del mar pueden aportar a la Isla. La Geria es un costosísimo y sorprendente huerto con más de 5000 hectáreas de superficie repartidas entre cinco municipios, fruto del trabajo tenaz y sabio de los conejeros, donde extraen y convierten el néctar de la tierra en dorados y luminosos efectos en la copa y el ánimo: el malvasía.
El mismo efecto de ensoñación que nos producen los vinos lanzaroteños, lo podemos percibir a través de nuestros sentidos en cualquier punto de la Isla: la luminosidad, el viento que limpia la atmósfera, el calor de la proximidad sahariana compartido y atenuado por la brisa fresca del Atlántico omnipresente. Unas sensaciones que han influido en la arquitectura singular de la Isla, a través de unas características que nos hablan de una tipología de construcciones original, diferente, integrada en el paisaje, al igual que la vestimenta tradicional que intentaba proteger a los agricultores y pescadores del sol permanente y del viento. Unas gentes que a lo largo de los siglos han luchado contra un medio hostil y duro, cubierto por suelos volcánicos, yermos, que impedían disfrutar de la feracidad y abundancia generosa que caracteriza al conjunto de las Islas Canarias.
Pero no se doblegaron. Levantaron no sólo el espectacular paisaje de La Geria con sus miles de ‘macetas’ de picón (lapilli) escarbando la tierra volcánica; también crearon numerosas salinas, las mayores y más hermosas de Canarias, para poder conservar en salazón la gran cantidad de pescados que el pueblo conejero capturaba en el generoso banco pesquero canario-sahariano.
Todo ese enorme esfuerzo de siglos tiene actualmente una utilidad simbólica. Ahora estamos ante un rico y variado patrimonio histórico formado por salinas, La Geria, incluso las viviendas y las fortificaciones que en otras épocas protegieron a los habitantes de la Isla de las constantes expediciones de piratas berberiscos para hacerse con los bienes y con esclavos (en ocasiones en represalia por las que acometieron los propios isleños); todos estos recursos y otros que dirigían su esfuerzo hacia la agricultura o la pesca, ahora son símbolos de la nostalgia y el pasado, lugares conservados como elementos de un paisaje cultural de otras épocas y de un esfuerzo titánico que quedan como espectaculares imágenes captadas por miles de turistas que visitan Lanzarote atraídos por sus singulares paisajes naturales y tradicionales.
El gran artífice de este éxito de la ‘marca’ de Lanzarote es un artista que ha heredado la sabiduría de siglos de vinculación, respeto y convivencia del lanzaroteño con su isla. De hecho, la iniciativa de convertir Lanzarote en un destino de primer orden en el mundo no se debe exclusivamente a César Manrique. Lo cierto es que tuvo que contar con la complicidad y mecenazgo de José Ramírez Cerdá (entonces presidente del Cabildo Insular) y la participación de otro personaje capaz de lograr la integración perfecta de los recursos de luz y sonido, Jesús Soto, además de otros colaboradores. Pero, sobre todo, ha sido determinante la implicación de la sociedad isleña con los objetivos de desarrollo responsable que han dado lugar a que Lanzarote disponga hoy día de un Parque Nacional, en Timanfaya, y otros doce espacios protegidos por la legislación autonómica, además de la declaración de Reserva de la Biosfera por la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura).
César Manrique dejó numerosas obras en la Isla, espacios que transformaron lugares de gran valor natural y paisajístico como Los Jameos del Agua, la Cueva de los Verdes, el Mirador del Río o Timanfaya. Asimismo, intervino en la creación de espacios para la cultura: el Museo Internacional de Arte Contemporáneo en el Castillo de San José, la Casa Museo del Campesino, el centro cultural El Almacén o el Jardín de Cactus.
La herencia de Manrique se palpa en todos los rincones de la Isla, si bien es probable que muchas de las cosas que podamos observar no sean más que el fruto de su influjo en los demás habitantes o los numerosos residentes que han establecido su hogar en este pequeño territorio de apenas unos 845 kilómetros cuadrados, como el Premio Nobel de literatura, José Saramago. El lanzaroteño y el foráneo que ha decidido quedarse en la Isla saben que poseen una valiosísima herencia que les ha entregado la naturaleza, junto a la mano sabia de generaciones de lanzaroteños que han convertido el paisaje dramático de la lava en bellas composiciones que cautivan a quien observa cualquier detalle de la isla con esa calma, serenidad y placer que sólo Lanzarote puede ofrecer.
Una isla mágica y única para los sentidos, donde nos puede incluso sorprender la limpieza, los colores puros e inmaculados de sus construcciones o su cielo, el orden academicista de los viales sobre el caos de una tierra reventada desde sus entrañas… Todos los elementos forman parte del espectáculo, de la personalidad de un territorio que merece ser visitado y que quedará en la memoria como una experiencia única.

Este artículo lo escribí para la revista Ronda Iberia de noviembre de 2010
Ver el artículo en slideshare
Descargar el artículo en formato pdf

martes, 4 de enero de 2011

Canarias, primer destino de naturaleza de la historia

Versión del mapa de Ptolomeo
Los gallegos se jactan de afirmar que el primer sendero turístico de la historia es la ruta de Santiago. No les voy a quitar el mérito, pero los canarios deberíamos aprender de este marketing que tiene como fundamento ensalzar un hecho histórico como hito iniciático: ser el primero es como ganar una medalla olímpica, y Canarias debería estar orgullosa de su gran triunfo histórico de ser el primer destino de naturaleza en el mundo.
Los autores clásicos recogen mitos y leyendas sobre la Atlántida y los misteriosos (y tenebrosos) espacios que se abrían para la mentalidad humana en los primeros momentos del desarrollo del conocimiento como sociedad capaz de reconocer el espacio y el tiempo.
Pero no vamos a incidir en continentes desaparecidos o islas que aparecen y desaparecen del imaginario sanborondoniano. Recopilemos toda la literatura clásica que habla de las Islas Afortunadas, las Hespérides, los Campos Elíseos equivalentes al paraíso... El territorio donde el clima es generoso gracias a una temperatura estable y a una naturaleza bondadosa que obsequia al humano con una generosa alimentación sin apenas esfuerzos ni sometida a las variaciones estacionales.
Hemos de poner en valor ese patrimonio intangible que los grandes literatos y hombres de ciencia de la Grecia clásica nos obsequiaron a perpetuidad. Un regalo que no aprovechamos y que queda reflejado en el primer intento de cartografiar el mundo conocido en el mapa de Claudio Ptolomeo, que no se conservó pero que fue recreado gracias a sus numerosas citas y datos publicadas en la obra Geographia y que recogen sin lugar a dudas la existencia de nuestro archipiélago como 'Insula Fortunae'.
Ciertamente, esa fortuna no hemos sabido aprovecharla, pero nunca es tarde.

El turismo en Canarias ante el reto de la sociedad en red

Mapa de Ptolomeo donde figura: Insulae Fortunae
Vivimos una etapa en la que las fronteras se diluyen o desaparecen. El tiempo en los transportes se reduce hasta la inmediatez. Los contenidos y las divisas de transmiten a la velocidad de la luz. La visión de la sociedad como una ‘Aldea global’ que anunciara en 1962 Marshall McLuhan, ha sido superada por la red de redes que pusieran en marcha los militares americanos en 1968 y que fuera transformada y transformadora de la sociedad civil en 1980 al surgir lo que conocemos como internet y que hoy está presente en casi toda actividad humana.
En apenas 20 años, desde su irrupción en Canarias, todo ha cambiado. Las comunicaciones, la economía, la organización social, la transmisión de la información… En muchos casos el nuevo paradigma de la comunicación ha democratizado la actividad social; en otros ha profundizado la brecha entre pobres y ricos en el mundo; también ha generado tal volumen de recursos que es imposible abarcar, surgiendo un nuevo modelo de economía y de relaciones laborales en el que el control de la información no garantiza la supervivencia. Por el contrario, las empresas y los emprendedores que han conseguido fortunas incalculables en los últimos años son conocedores del nuevo lenguaje logarítmico que aprovecharon para crear comunidades para compartir y atraer una masa crítica de usuarios.
El mundo ya no es lo que era, ni será reconocible dentro de unos días porque la tecnología y las comunicaciones no crecen progresivamente, sino exponencialmente.
Esos niños ‘Nintendo’ que entran en la adolescencia tienen otra forma de comportarse, de acceder al conocimiento, de comunicarse... Son capaces de acceder a una enorme información sin límites ni fronteras, sin imposiciones ni dogmas. Pero también son víctimas de esa inmediatez que los aleja de la conciencia y la sabiduría, de su identidad. Viven en un nuevo paradigma de la comunicación que tiene capacidad de alienar a enormes masas de personas de países y lenguas distintas. Ese es el riesgo y el reto.
Pero vivir en estas Islas Canarias también tenía su coste, sus dificultades, sus barreras, aunque fueran de mar: La emigración, las hambrunas, la diáspora, la pobreza, el analfabetismo, la falta de recursos, de infraestructuras, las imposiciones de la metrópoli… hicieron de este paraíso un lugar asfixiante durante demasiado tiempo. Hasta que la sociedad del bienestar en Europa, gracias a la gran reconstrucción tras la segunda guerra mundial, hizo posible que millones de obreros desearan disfrutar de algo que no tenían: la naturaleza en su expresión más generosa. Ese objeto de deseo se convirtió en fuente de riqueza para Canarias, pero también aceleraría procesos de destrucción que debieron ser evitados.
A principios del siglo XX un grupo de isleños anticipaba que Canarias tendría un futuro espléndido mediante el desarrollo turístico. No era nada nuevo: Ya en la antigüedad los escritores clásicos se encargaron de crear la ‘marca’ turística más antigua de la historia de la Humanidad: las Islas Afortunadas, el Jardín de las Hespérides o más fantasioso todavía si consideramos las Islas como el continente perdido, la Atlántida. Sea como sea, Canarias surge en la Historia como el primer destino turístico de naturaleza en el mundo, de la mano de Homero y los clásicos griegos y romanos.
Con altibajos, la historia de Canarias continúa presente en la historia de la Humanidad, gracias a ser lugar de tránsito de descubridores, navegantes, viajeros, pioneros de la aviación y, sobre todo, a partir del siglo XVIII se convierte en sanatorio de los europeos, los llamados ‘invalids’, personas enfermas de pulmón con limitada esperanza de vida en ciudades insalubres por la polución de la revolución industrial, con la esperanza puesta en sobrevivir unos años más gracias al reposo y el buen clima de las islas macaronésicas. Esa etapa de turismo de salud tiene un impacto leve sobre la actividad económica y social en las Islas, limitada a unos pocos centros de alojamiento que –por cierto- no eran bien vistos por la población, por temor al contagio, y cuyas plazas se limitaban a las limitadas conexiones de los vapores o veleros que hacían escala en Canarias.
Pero, como decía, unos visionarios consideraban que las Islas tendrían un futuro prometedor. Personajes como los grancanarios Francisco González Díaz, Fray Lesco y su Escuela Luján Pérez, o Néstor Martín Fernández de la Torre, quienes animaron a la ciudadanía hacia un proyecto común, de la sociedad civil… La creación de un destino turístico con personalidad, buscando en las raíces de las tradiciones, la naturaleza, el arte… los elementos necesarios para competir con los destinos soñados de aquel entonces: las monumentales ciudades europeas.
La ciudadanía se movilizó, buscaron apoyos, salieron a la calle en manifestaciones pro turismo, elaboraron estudios y proyectos, estimularon la creación de infraestructuras para barcos de pasaje y promovieron la creación de aeropuertos que facilitaran una rápida comunicación con el continente. Intentaron recuperar el folclore, los juegos tradicionales, lucharon contra la tendencia de una indumentaria importada que en aquel entonces predominaba agravada por la pobreza y suciedad extendida en una sociedad en crisis que retratara Domingo J. Navarro magistralmente en su obra ‘Recuerdos de un noventón’.
Pero la guerra civil truncó aquel movimiento y la paz posterior fue un tiempo de penurias; de un país que sólo podía recurrir a inversores peninsulares o extranjeros (en especial, los fondos de inversión que liberalizó Strauss en Alemania para sacar los excedentes financieros fuera del territorio germano). Sin embargo, traía sus riesgos. El objetivo era la rentabilidad inmediata, de ahí que se construyera con una premisa: dar alojamiento a los pasajeros que cabían en cada charter que llegaba a las Islas. Los complejos turísticos tenían tantas camas como pasajes transportaba un avión. Y así vivimos en el desarrollismo desde 1960, casi sin parar.
Hoy día, Canarias es un destino turístico de primer orden en el mundo. Uno de cada cinco turistas que visita España al año lo hace a Canarias, dato significativo para el segundo país del mundo que más turistas recibe. Igualmente, Canarias es donde las estancias de los turistas son más largas. Pero, llegar a este puesto, a estas estadísticas de vértigo, ha tenido un coste. La imagen, la marca del destino turístico canario se ha contaminado de los símbolos negativos del turismo de masas, lo que ha puesto en peligro una imagen de marca gestada y consolidada a lo largo de los siglos, quizás la marca más longeva como destino turístico de la historia de la Humanidad.
La gestación y consolidación de la ‘marca’ la describe magistralmente José de Viera y Clavijo cuando habla de la existencia de la isla de San Borondón, al señalar que “…tiene la propiedad de presentarse a los ojos y de huirse de entre las manos…”.
Pero hubo quienes creyeron en una marca, una identidad propia como destino turístico. La huella de Néstor pervive, a duras penas, languideciendo lentamente en Gran Canaria, debido a la ignominia de la mayor parte de sus dirigentes políticos y económicos que prefieren permitir que las privilegiadas playas de nuestras Islas se llenen de edificios clonados de otros destinos turísticos y que hacen que un turista no recuerde dónde ha estado de vacaciones porque las tiendas, la arquitectura, el personal que les atiende, los productos que consume no se distinguen. Son iguales –o casi- en todas partes… El sector turístico en Canarias, mayoritariamente, se ha convertido en una commodity, es decir algo que se despacha a granel, sin personalidad.
También tenemos el ejemplo de Manrique. Otro visionario que, junto a Ramírez, Soto y otros muchos que les acompañaron o les siguieron, han hecho posible que esta isla, Lanzarote, tenga una marca propia, una identidad que reconoce todo el mundo. Una personalidad que cautiva pero que también corre el riesgo de morir de éxito.
De todos modos, a lo que vamos. ¿Cómo puede afrontar Canarias como destino turístico el paradigma de la globalización? Creo que hemos que rescatar y defender los modelos turísticos que nuestros creadores y artistas han puesto en valor y a quienes las consultoras foráneas han ninguneado en sus costosísimos planes estratégicos pagados alegremente con nuestros impuestos.
Por ello, volvamos a defender la mejora del paisaje para el paisanaje, la integración entre los ciudadanos y los turistas con el territorio y no la utilización del territorio bajo la excusa del rendimiento económico. Junto a esas garantías, hemos de propiciar el cambio, la adaptación a los tiempos que corren y los que se avecinan, que no son los de la masificación y la estandarización, sino los de la diferenciación, personalización, posicionamiento y aplicación de las tecnologías en las actividades productivas y ¿por qué no? En las de ocio y turismo.
Si queremos afrontar el nuevo paradigma, lo hemos de hacer posicionándonos con nuestros valores: el clima,  la naturaleza, la visión artística del espacio único que nos rodea, la cultura y las tradiciones únicas, autóctonas y a su vez universales… Y, por supuesto, con el impulso científico y tecnológico que nos ha de permitir lograr el Progreso, ése que señala nuestro Congreso.
Comunicación e imagen que presenté en el II Congreso Progreso e Identidad de Canarias de la Orden del Cachorro en Arrecife de Lanzarote